Al mismo tiempo que en Santiago se discutía una vez más el reparto de xarda con la Consellería de Medio Rural e do Mar, y pese a que ya abandonaron las reivindicaciones a pie de calle, en el puerto de Vigo (al igual que en A Coruña) tuvo lugar una sonora pitada por parte de la flota de cerco. Los barcos, ataviados todavía con los carteles reivindicativos de otras jornadas, se unieron en el puerto pesquero para hacerse sentir y volver a protestar así por una distribución "más justa" de los cupos.