En la última semana volvieron a registrarse importantes "secas", que es como se define a la bajamar cuando es acusada y el nivel del agua desciende más de lo habitual. Sin embargo, el mal tiempo reinante impidió de nuevo que los bateeiros pudieran aprovechar esas "secas" para recolectar de las rocas del litoral la ansiada mejilla, es decir, la semilla del mejillón que necesitan "raspar" -como si de percebe se tratara- para preparar la siguiente campaña. Así pues, se agravan los problemas derivados de la escasez de semilla y del mal tiempo reinante durante el otoño y el invierno. Esto supone que el sector acumula un importante retraso y la cría del molusco está aún sin "encordar", o lo que es lo mismo, lo bateeiros no pudieron sujetarla -con una red biodegradable- a las cuerdas de sus bateas en las que debe crecer durante los próximos meses. Ya se apuntaba hace días que Mar puede ampliar el plazo de recogida hasta finales de junio, y no se descarta que sea julio.