AcogES+
Un hogar cálido y seguro
Convertirse en familia de acogida es probablemente uno de los compromisos solidarios más gratificantes que puede vivir toda persona que ofrezca su hogar a un niño, niña o adolescente que lo necesite. No obstante, son muchos los retos y desafíos que conlleva sumergirse en la aventura del acogimiento.
Todas las familias de acogida desempeñan un papel fundamental a la hora de proporcionar a los niños y niñas que crecen en el sistema de protección un entorno que les ayude a sentirse queridos y respetados, así como a establecer vínculos de apego y redes de apoyo familiares y sociales. Pero, en este sentido, es especialmente destacable el compromiso de las familias que abren sus hogares a grupos de hermanos o a niños y niñas que, por sus necesidades específicas, demandan de toda la atención y cuidados de sus personas adultas de referencia.
En Galicia actualmente hay 1973 niños, niñas y adolescentes tutelados en acogimiento residencial y familiar y 890 en la modalidad de acogimiento solo residencial. Aunque, en los últimos años, se ha potenciado la cultura del acogimiento familiar, se necesitan más familias que les brinden una segunda oportunidad a los niños, niñas y adolescentes que más lo necesitan. En este sentido, la organización de atención a la infancia Aldeas Infantiles SOS destaca que el objetivo no es “encontrar un niño para cada familia” sino “una familia para cada niño”, poniendo siempre como prioridad el bienestar y necesidades específicas de cada niño o niña.
Un compromiso con los niños y niñas
Las familias de acogida asumen los mismos retos que cualquier padre o madre: educación, aprendizaje diario, cuidados médicos, y demás aspectos que garanticen el desarrollo integral del niño o niña. Todo ello, sumado a su historia de vida y a las circunstancias concretas que hayan causado la separación de sus familias de origen. En este sentido, Aldeas Infantiles SOS señala que “los niños y las niñas en acogimiento necesitan de adultos incondicionales que les acompañen, que estén siempre disponibles, que no les juzguen, que les respeten y que les garanticen que, pase lo que pase, seguirán estando ahí”.
Estos desafíos se acentúan cuando hablamos de niños y niñas que presentan necesidades especiales como problemas de salud, necesidades educativas, dificultades emocionales, y también de grupos de hermanos en los que haya algún menor de seis años. Para todos ellos, es especialmente difícil encontrar una familia de acogida que les ofrezca los cuidados y atención plena que demandan.
Aldeas Infantiles SOS ofrece a las familias de acogida formación continua, terapia familiar y participación en grupos de apoyo en los que compartir sus vivencias.
AcogES+
Con el objetivo de ayudar a estos niños y niñas, Aldeas Infantiles SOS ha puesto en marcha el programa AcogES+. Esta iniciativa se basa en una modalidad de acogimiento familiar con dedicación exclusiva en la que existe una vinculación contractual y contraprestación económica, puesto que las características excepcionales de los niños y las niñas requieren de toda la atención y cuidados de sus familias de acogida.
En concreto, una de las personas adultas que conviva en el hogar deberá disponer de la totalidad de su tiempo para ofrecer a cada niño o niña atención y dedicación completa en un entorno estable y seguro que les ayude a crecer sanos y felices.
En todo momento, las familias serán apoyadas y asesoradas por un equipo de profesionales de Aldeas Infantiles SOS especializados en acogimiento. Además, recibirán formación continua, terapia familiar, y podrán participar en grupos de apoyo en los que compartir sus vivencias con otras familias de acogida. También se favorecerá una relación positiva con las familias de origen para contribuir a reparar posibles daños y ayudar a niños y niñas a construir una nueva historia de vida.
El proyecto tendrá una duración de tres años y llegará al menos a 60 niños, niñas y adolescentes tutelados por las comunidades autónomas de Cantabria, Castilla-La Mancha, Galicia y Madrid. En ellas ya hay grupos de hermanos dentro del programa que esperan encontrar pronto la familia de acogida más adecuada para ellos.