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Alumnos y profesores del CIFP Manuel Antonio exigen un cambio de centro mientras duren las obras: «No se puede respirar»

Con el curso ya avanzando, los cerca de 2.000 alumnos y docentes del mayor centro de FP de Galicia sufren la «falta de planificación» en los trabajos de reforma

La dirección pide prudencia: «Es un engorro pero no disponemos de otro centro para ir»

Manifestación de alumnos y profesores del CIFP Manuel Antonio

Alba Villar

Vigo

Polvo, ruidos constantes, productos tóxicos... Los cerca de 2.000 estudiantes y profesorado del CIFP Manuel Antonio de Vigo se han plantado ante las obras que se están llevando a cabo en el centro educativo desde comienzos de curso. Reclaman que se habiliten otros espacios mientras duren los trabajos.

«Houbo unha falta de planificación. A nosa fortaleza son as prácticas e non as podemos dar. Temos os talleres da rama de Sanidade pecados dende o inicio do curso e isto afecta a calidade do ensino. Escoitamos a todas horas martillazos, trozos de escombros caer, non se pode respirar nas aulas e pasillos...», cuentan varios profesores que participan de la concentración frente a las puertas del centro vigués, el más grande de FP de toda Galicia.

La dirección del centro, consultada por este periódico, es consciente de las molestias y contratiempos que suponen las obras pero hace también un llamado a la prudencia. «Es un engorro pero no disponemos de otro centro. Se están habilitando aulas en zonas más alejadas a las obras para molestar lo menos posible pero contamos con 78 grupos distintos y los espacios son los que son, no tenemos más», explica Iván Iglesias, director del CIFP Manuel Antonio.

El máximo responsable del centro de Formación Profesional explica que sí existe un cronograma de las obras pero estas han sufrido varios imprevistos. «Se tardó más de la cuenta en obtener la licencia municipal. Las obras arrancaron en junio y aunque pueda parecer que no se hizo lo que debiera han surgido imprevistos. Pese a todo se ha creado una unidad técnica que está en constante contacto con nosotros para que las molestias sean las menores posibles», amplía Iglesias.

Talleres «funcionales»

Con respecto a los ruidos, el director del CIFP Manuel Antonio cuenta que se intentan respetar por parte de los operaciones las horas lectivas, recordando que son varias las empresas que realizan estas mejoras.

«Sé que son incómodas pero también muy necesarias. Había goteras, había que reformar los baños y talleres... Ahora es verdad que no están finalizadas pero sí son ya funcionales», concluye Iván Iglesias.

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