«Aquí hay mucha plata»: las graves amenazas de un empresario de Vigo a un trabajador

El dueño de dos empresas afronta prisión acusado de enviar a dos individuos para intimidar a un empleado en represalia por un pleito laboral

La vista oral se celebrará en octubre en la Ciudad de la Justicia.

La vista oral se celebrará en octubre en la Ciudad de la Justicia. / Marta G. Brea

Marta Fontán

Marta Fontán

Vigo

«Si no retira las denuncias aquí hay mucha plata; si no somos nosotros van a ser otros». Dos individuos, uno de ellos con acento sudamericano, se presentaron la mañana del 15 de enero de 2024 en la vivienda de un vecino de Vigo y le soltaron estas intimidantes palabras para que se las transmitiese a su hijo.

Esos varones nunca llegaron a ser identificados, pero sí lo fue la persona que presuntamente los envió para realizar esta advertencia. Se trata del gerente de dos empresas viguesas que ahora deberá sentarse en el banquillo acusado de amenazar a un empleado en el contexto de un conflicto laboral del que también fue víctima otra trabajadora. La Fiscalía pide 4 años de prisión y la acusación particular eleva su solicitud a 7 años y medio.

Juicio señalado para el 1 de octubre

El juicio por esta causa que se sigue por la presunta autoría de delitos de obstrucción a la justicia, daños y amenazas, hechos que la defensa niega y por los que interesa la libre absolución, ha sido señalado para el 1 de octubre en el Juzgado de lo Penal 1 de Vigo. Todo se remonta a finales de 2023, concretamente a la mañana del 30 de noviembre.

Ese día se celebró en un juzgado de lo Social de Vigo un juicio contra las empresas del acusado promovido por este empleado y en el que intervino como testigo, a instancia de su compañero, la otra trabajadora. «En represalia por tales actuaciones procesales», reza el auto judicial con el que se dio por concluida la instrucción, el empresario fue a los edificios donde vivían ambos empleados y, «con un martillo u otro objeto contundente similar», supuestamente golpeó y daño los telefonillos de los inmuebles.

La cosa no quedó ahí. Los perjudicados presentaron respectivas denuncias ante la Policía Nacional y fue en «represalia» de las mismas cuando el acusado envió supuestamente a los dos individuos a amenazar al trabajador, hechos que ocurrieron algo más de un mes después, el 15 de enero de 2024. «Yo soy el mensajero, venimos de la casa de tu hijo», le espetó uno de estos hombres al padre de la víctima, instándole a continuación, de forma intimidatoria, a que transmitiese a su hijo que retirase las denuncias.

En un grupo de WhatsApp

Hay además otros hechos por los que no acusa la Fiscalía, pero sí la acusación particular —y que se introdujeron en la resolución judicial antes citadas por orden de la Audiencia Provincial de Pontevedra—, consistentes en supuestas amenazas a través de teléfono móvil. Se trata de unos mensajes que el empresario habría proferido en un grupo de WhatsApp de moteros donde, entre otros miembros, estaban él y un amigo del denunciante.

Unos mensajes en los que habría amenazado con «atropellar» a su subordinado. «Como tengo el ‘mini’ aprovecho que la reparación es más barata», escribió. Como continuación de esa conversación también puso que «[...] con suerte baja a pasear al perro y ya los mato a los dos», expresando en dicho mensaje, sobre el lugar donde vive, que «con suerte hay detectives que te consiguen la dirección buena». Junto a penas de prisión y multa, los perjudicados piden ser indemnizados por daños morales.

El caso

  1. Delitos de amenazas, daños y obstrucción a la Justicia

    El juicio ha sido señalado para el 1 de octubre en el Juzgado de lo Penal número 1 de Vigo.

  2. Petición de hasta siete años y medio de prisión

    El fiscal pide 4 años de cárcel y la acusación particular lo eleva a 7 años. La defensa solicita la absolución.

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