Condena mínima de dos años y medio de cárcel para la banda croata de asaltos a viviendas capturada en Vigo

En prisión provisional desde que fueron capturados en diciembre de 2023, todo apunta a que pronto quedarán en libertad ya que su abogado pedirá la suspensión de la pena

Los integrantes de la banda, en el juicio

Los integrantes de la banda, en el juicio / Alba Villar

Marta Fontán

Marta Fontán

La banda itinerante de asaltos a viviendas capturada en Vigo a las puertas de las navidades de 2023 se sentó este jueves en el banquillo en Vigo. Dos croatas y un italiano afrontaban inicialmente penas que suman 21 años de prisión, siete años para cada uno, pero un acuerdo de conformidad alcanzado entre la Fiscalía y el abogado defensor redujo la condena, ya dictada in voce en la Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, a dos años y medio de cárcel para cada acusado: 22 meses por un robo consumado y 8 meses por el que se frustró.

Ya en prisión provisional desde que fueron detenidos en diciembre de 2023, todo apunta a que pronto recuperarán la libertad. El letrado pedirá la suspensión de la ejecución de la pena de cárcel al considerar que se cumplen los requisitos legales: hubo reparación del daño ya que los acusados ingresaron una cantidad incluso superior a la responsabilidad civil fijada (8.610 euros), las penas impuestas por separado no superan los dos años de cárcel y carecen de antecedentes penales en España.

En el acuerdo se aplicó una circunstancia atenuante de dilaciones indebidas y otra de reparación del daño. Dado que dos magistrados de la sala estaban recusados por haber intervenido en resoluciones judiciales de esta causa durante la fase previa de instrucción, tuvo que acudir una jueza de la otra sección viguesa, de la Sexta, para completar el tribunal y poder realizar la conformidad.

Ruta Santiago-Ourense-Vigo

Presuntos integrantes de un grupo dedicado a robar joyas y dinero, en diciembre de 2023 alquilaron a través de Booking una vivienda turística en Santiago alegando motivos laborales. El primer robo que les imputa el fiscal fue en un piso de Ourense, al que fueron supuestamente la mañana del 7 de diciembre, llevándose relojes y joyas valoradas en 7.600 euros y 2.200 euros en efectivo.

Por la tarde fueron a Vigo. Aparcaron en la calle Nicaragua y entraron en un edificio de Simón Bolívar: subieron a la quinta planta y empezaron a timbrar en dos pisos, dirigiendo una linterna a las mirillas «para asegurarse que las viviendas estaban vacías». Pero dentro de uno de esas casas estaba un vigués con su hijo que, desde dentro, empezó a gritar advirtiéndoles de que iba a llamar a la Policía, por lo que los delincuentes huyeron. Este testigo fue clave ya que siguió a los ladrones, facilitando que la Policía Nacional pudiera finalmente detenerlos.

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