La vivienda alquilada en Vigo en 2024 fue un 5,9% más cara que en 2023
El Observatorio da Vivenda de Galicia registró entre enero y diciembre el depósito de casi 5.100 fianzas, unas 400 menos que en el año anterior
La cuantía media ascendió a casi 650 euros

Alba Villar
Entre los propósitos de 2025 de la ciudad, un año más, está facilitar el acceso a una vivienda, un derecho constitucional que va camino de ser un lujo. A la espera de la aprobación definitiva del nuevo Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM), paso previsto por el Concello para finales de 2024, el precio de los pisos y casas que se han alquilado en la urbe más poblada de Galicia sigue aumentando. Según el Observatorio da Vivenda de Galicia, casi un 5,9% entre diciembre de 2023 y el mismo mes de 2024. Hace un año, la cuantía media de las 5.484 fianzas depositadas en el departamento de la Xunta ascendió a 612,4 euros; 12 meses después, a 648,5 euros, la media de 5.070 contratos firmados.
Esta situación tiene varios culpables. Expertos vinculan el alza de precios con las políticas intervencionistas, que, según defienden, han provocado la derivación de pisos y casas del mercado de alquiler tradicional al turístico, más rentable y con «mayor seguridad jurídica»; en la ciudad olívica, su protagonismo crece a la vez que lo hace la huella del turismo, impulsada por la Navidad y las playas. En Vigo, es evidente que uno de los grandes motivos es la falta de un Plan Xeral actualizado —el que está en vigor es de 1993— que permita la construcción de vivienda: la oferta se mantiene y la demanda aprieta, por lo tanto, los caseros, en un contexto de inflación, aumentan las cantidades exigidas a los inquilinos cada mes.
Desde la Federación Galega de Empresas Inmobiliarias (Fegein) y la Asociación de Promotores Inmobiliarios de la Provincia de Pontevedra (Aproin), destacan desde hace tiempo la importancia de la entrada en vigor del nuevo Plan Xeral. Además de limitar los pisos turísticos, permitirá la construcción de más de 50.000 viviendas —casi 14.400, con algún tipo de protección—, cantidades que, según los expertos, ayudarán a bajar los precios tanto de alquiler como de venta. En todo caso, se espera que el ritmo de construcción no sea todo lo rápido que demanda la ciudad más poblada de Galicia, por lo que reclaman que las administraciones públicas tomen cartas en el asunto cuanto antes.
Una de las medidas impulsadas desde el Gobierno central es la limitación del precio del alquiler, que aún no se aplica en Vigo: el alcalde, Abel Caballero, anunció en mayo la contratación de un estudio para conocer qué zonas en la ciudad están tensionadas en esta materia para poder aplicar la normativa —siempre y cuando lo permita la Xunta, que se muestra a favor a pesar de las dudas iniciales—. Más esperanzas: la ampliación del polígono de Navia por parte de la administración autonómica o el desarrollo de vivienda del Concello en este mismo barrio, así como en Esturáns y Barreiro. El Ejecutivo central prometió facilitar el acceso a la vivienda con una gran empresa pública, plan ya en marcha.
La oferta bate un nuevo récord: 10,3 euros por m2
Según Idealista, uno de los portales inmobiliarios más visitados para la búsqueda de un lugar para residir, el metro cuadrado de las viviendas en alquiler —es decir, las disponibles, sin inquilinos— se situó en diciembre en 10,3 euros de media, récord histórico: batió la cifra de 10,2 euros de abril, junio, octubre y noviembre.
Subió prácticamente 1 euro desde el mismo mes del año 2023, cuando se quedó en 9,4 euros: es el incremento interanual más pronunciado de la serie histórica recogida por Idealista, con números desde junio de 2010. En porcentaje: casi un 9,6% de evolución, muy superior al IPC, que cerró 2024 en el 2,8%. Otra comparación: en los últimos 10 años, el precio del alquiler en Vigo ha aumentado más de un 51%. En diciembre de 2014, el metro cuadrado estaba a 6,8 euros. En todo caso, es A Coruña la urbe gallega con el alquiler más elevado: 10,6 euros.
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