La avenida de Madrid será más segura: un paso de cebra cada 180 metros

El Portal de contratación del Estado recoge ya la reforma, que empieza tras la Navidad

Vehículos circulando por la avenida de Madrid, un vial hostil para los viandantes.

Vehículos circulando por la avenida de Madrid, un vial hostil para los viandantes. / Ricardo Grobas

La nueva avenida de Madrid será más bonita y moderna, pero también ofrecerá más seguridad a los peatones. El proyecto de reforma integral del tramo entre la Praza de España y el Seminario Mayor –más de 2,4 kilómetros– ya está publicado en el Portal de contratación del Estado, días después de ser aprobado por el Concello. Contempla la instalación de nuevos semáforos, dos radares, más espacio para los viandantes y más pasos de cebra: habrá uno cada 180 metros. Son medidas necesarias en una lengua de asfalto que registra una media de 50.000 trayectos de vehículos motorizados al día.

La intervención supondrá pasar de los seis lugares habilitados actualmente para el cruce de los viandantes a 12, el doble. Para decidir su ubicación, “se tuvieron en cuenta los itinerarios naturales de los peatones, que suelen coincidir con los caminos más cortos”. Se identificaron las zonas de atracción o que generan un mayor número de peatones y se estudiaron sus movimientos para determinar la ubicación idónea.

También se consideró emplazarlos en el entorno de las intersecciones con otros viales para favorecer los movimientos en estas zonas, que suelen entrañar mayor riesgo. Y, para reforzar la seguridad, se prohibirá aparcar en los 10 metros más próximos a los pasos de peatones.

Entre todas las actuaciones propuestas para la potenciar la seguridad vial, las principales que se proyectan son la renovación y ampliación mediante elementos de granito y la inclusión de elementos ornamentales en aceras, la implantación de nuevos pasos peatonales semaforizados, la redistribución y mejora de la iluminación en el tramo mediante traslado de luminarias a la mediana, la eliminación de las vallas metálicas en la terciana y la remodelación de intersecciones.

Esta obra, financiada por el Concello de Vigo (30%) y el Gobierno central (70%) a través de un convenio firmado por ambas partes con un presupuesto de 16,8 millones de euros–, empezará tras la Navidad. Lo aseguró recientemente el alcalde, Abel Caballero. Concretó que la intervención, que se prolongará unos 12 meses, dará paso a una avenida “toda humanizada e integrada en la ciudad, con zonas verdes, espacios y permeabilidad peatonal”.

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