En las últimas horas atracaron en Vigo dos embarcaciones de muy distinto perfil: el súper-yate Solandge y el transporte de peces vivos Triton. Ambos barcos hicieron escala para hacer consumo haciendo un alto en sus singladuras entre Gibraltar y Holanda en el caso del barco de recreo y entre Algeciras y Noruega en el del buque-transporte.

Construido en 2013 en los astilleros alemanes de Lürssen con una inversión de 150 millones de dólares para el multimillonario ruso Alexander Girda, fundador de una cadena de alimentación en 2006 en su país, el Solandge no destaca por su tamaño en comparación con otros grandes mega-yates que tiene atracado en Vigo. Aun así, sus 85 metros de eslora no pasan desapercibidos en el muelle de Marina Davila, aunque todo su poderío lo esconde en sus fastuosos interiores que ejemplifican elegancia, el lujo y artesanía hasta el punto de que años más tarde pasó a manos de un príncipe árabe según el portal superyachtfan. Cuenta con capacidad para 12 huéspedes en seis lujosos camarotes y 23 tripulantes, aunque a Vigo llegó con 20.

El 'Triton', atracado en el muelle de Beiramar Incargo Galicia

Por su parte el Triton es un barco que alberga en sus interiores varios tanques para el transporte de peces vivos, salmones y truchas básicamente, que son llevados desde las zonas de pesca a criaderos ubicados tanto en mar como en tierra, práctica bastante habitual en las empresas del sector de la acuicultura ubicadas entre otros, en Escocia y Noruega.

Tanto el Triton que arribó tripulado por 8 personas como el Solandge fueron consignados por Incargo Galicia.