Diez curiosidades del gran sueño aéreo de Vigo

Una parte importante del Peinador que comenzaron a construir los vigueses con su esfuerzo, su sudor y sus ahorros (todo ello literal) acabó siendo una obra inútil. No fue su culpa. Al fin y al cabo, eran unos mandados. Fueron trabajos forzosos y las multas por no acudir a explanar la primera pista en 1936 eran cuantiosas. Tuvieron que picar mucha piedra y su sacrificio fue determinante para que Vigo pudiera cumplir su sueño aéreo. Pero la senda primitiva que crearon a base de pico y pala acabó convirtiéndose en fantasma. Lo importante es que se rectificó y que la ciudad puede hoy seguir sintiéndose orgullosa de haber luchado y levantado un aeropuerto que cumple 68 años desde su inauguración oficial en abril de 1954.

¿Por qué la explanación de la primera pista fue una obra inútil? Esta es una de las muchas curiosidades sobre el aeropuerto de Vigo que probablemente usted desconocía. A continuación podrá saber por qué parte del trabajo inicial que obligaron a realizar a los vigueses no sirvió de mucho y otras peculiaridades de los casi 70 años de historia de Peinador,

1. Trabajos forzosos y una pista inútil

Peinador comenzó a levantarse gracias al esfuerzo y el sudor de los vigueses. Es literal. Y por eso forma parte del orgullo olívico. Acababa de estallar la Guerra Civil Española y la construcción de un aeropuerto en Vigo se convirtió en un proyecto de ciudad. Obligado, eso sí: o trabajabas o pagabas para librarte. Fue uno de los gérmenes de la terminal olívica. Para la explanación de los terrenos del aeropuerto se impone con carácter obligatorio la prestación personal a los residentes vecinos de los municipios de Vigo, Lavadores y Mos que hayan cumplido 20 años y tengan menos de 50 años, rezaba el edicto oficial en 1936.

Si vas a Peinador, ti qué vas facer, danche de traballo e non de comer", recogía una copla que se popularizó en aquella época

Pero parte de lo que consiguieron crear los ciudadanos de Vigo, Mos y Lavadores fue desechado más tarde. Durante más de un año allanaron buena parte de la montaña y les hicieron sudar mucho, pero un gran tramo de lo que explanaron (o más bien lo que les habían obligado a explanar) se declaró inservible años más tarde.

Para mayor desgracia, el esfuerzo de los vigueses en la década de los años 30 no tuvo recompensa inmediata. A finales de 1937 se abría un vuelo Sevilla-Salamanca-Valladolid-Santiago y la obra de Peinador quedó en un segundo plano. Fue cuando se eliminó la prestación de trabajo personal y las obras quedaron prácticamente paralizadas.

Peinador en el NO-DO

El empeño de la ciudad por sacar adelante el aeropuerto relanzó los trabajos en 1946. El Ministerio del Aire aceptó apoyarlo si la corporación local adquiría los terrenos. Y así fue. Pero la explanación de la pista que habían realizado los ciudadanos años atrás y que tantos esfuerzos supuso, no servía. La orientación Este-Oeste que ejecutaron (ver fotografía sobre estas líneas) fue desechada por ser inservible para su utilización aeronáutica (Aena. (2004). Historia del Aeropuerto de Vigo). Fue probablemente por la cercanía de la cima del monte Galleiro a la cabecera Este y también por los vientos predominantes en Peinador lo que obligó a prescindir de aquella senda. Tuvo que "borrarse" y hacerse otra nueva perpendicular en la orientación actual: Norte-Sur.

2. ¿Por qué se llama Peinador?

Aunque no era la ubicación prevista inicialmente -se contempló su creación en las Gándaras de Budiño (O Porriño)- el aeropuerto de Vigo se levantó finalmente en Peinador, en la confluencia de los concellos de Vigo, Mos y Redondela.

Peinador fue su primer nombre oficial y a día de hoy todavía se mantiene, aunque de forma popular. De hecho, la historia de este nombre podría decirse que está más ligada al ferrocarril que a los aviones. El aeropuerto se construyó en las inmediaciones de la estación del tranvía de Peinador, que se había bautizado así por la familia Peinador, fundadora del balneario de Mondariz y de la sociedad del tranvía de Mondariz a Vigo cuya obra no se ejecutó en su totalidad y que acabó llegando solo hasta O Porriño.

A mayores, según relatan las crónicas de la época, parte de los terrenos para levantar el aeropuerto habrían sido expropiados también a esta familia.

3. Un nombre confuso que tuvo que ser "borrado"

Oficialmente el nombre de Aeropuerto de Peinador desapareció hace décadas. Concretamente en septiembre de 1965. Desde entonces es Aeropuerto de Vigo. Lo más curioso es el motivo por el que se "borró" Peinador, algo que también afectó a otras terminales españolas: era un nombre confuso.

El Ministerio del Aire fijó el 1 de septiembre de 1965 la denominación oficial de los aeropuertos españoles que supuso el fin oficial de Peinador. Las diversas fases por las que ha atravesado el desarrollo de los aeropuertos nacionales y el distinto criterio seguido en las antiguas denominaciones de los aeródromos, sobre la base, unas veces del nombre del núcleo urbano más próximo o más importante, y otras, de apellidos ilustres, han originado gran confusionismo en la denominación de los aeropuertos españoles que es preciso corregir, siguiendo para ello las directrices internacionales, se justificaba en la citada orden. Desde entonces es Aeropuerto de Vigo.

En los últimos años, al igual que en otras terminales españolas, se ha querido rebautizar como Aeropuerto de Vigo-Rías Baixas. Sin embargo, esta propuesta, promovida principalmente por sectores empresariales, no ha fraguado. Sí lo hizo, por ejemplo, la de Aeropuerto de Santiago-Rosalía de Castro.

4. "El Transiberiano", ¿el vuelo más raro?

En el verano de 1958, solo dos años después de la inauguración oficial de la terminal olívica, Peinador habría tenido una de las rutas aéreas más raras de su historia. Entre los pilotos y los tripulantes de Aviaco, la aerolínea que la operaba, se conocía como "El Transiberiano".

Este servicio aéreo, cubierto con un avión Bristol 170, recorría todo el norte peninsular. Por sus paradas, parecía más un tren o un metro. Tenía cinco paradas: Vigo-Oviedo-Bilbao-Zaragoza-Barcelona. Operaba los martes, jueves y sábados. El viaje de Vigo a Barcelona se demoraba casi seis horas tras una escala de 30 minutos en Asturias, País Vasco y Aragón.

5. ¿Sabía que nunca despega ni aterriza en Vigo?

Los terrenos del Aeropuerto de Vigo pertenecen a tres ayuntamientos: Vigo, Redondela y Mos. Aunque su ubicación puede resultar curiosa ya de por sí, más llamativo es algo en lo que usted probablemente no había deparado hasta ahora: nunca aterrizó ni despegó de Vigo.

Los tres ayuntamientos se "besan" justo en el centro de la pista de Peinador, frente a los terrenos del Aero Club (ver mapa sobre estas líneas). La mayor parte de la pista, hacia el Norte, pertenece a Redondela. Otro tercio aproximádamente, hacia el Sur, es casi en su totalidad de Mos. Solo un pequeño lateral en la zona central pertenece a Vigo. Como mucho, medio avión estaría temporalmente en la ciudad olívica en sus fases de despegue y aterrizaje. Por ello, siempre que levanta el vuelo o toma tierra, no lo hace nunca en Vigo, sino en Mos y Redondela. La terminal sí está ya íntegramente en el termino municipal vigués.

Un aeropuerto de ilustre atractivo: Peinador cumple años en el centro de los focos

6. Un cruceiro, entre los elementos más antiguos

Tres ampliaciones desde su inauguración en 1954 han modificado por completo el aeropuerto de Vigo. Pero todavía hay algunos elementos que Peinador conserva de sus primeros despegues. Probablemente el cruceiro que actualmente se ubica junto a la torre de control y que fue donado por Javier Sensat Curbera en julio de 1971 está entre los más antiguos que todavía son visibles.

El cruceiro es obra de Camilo Nogueira Martínez y tiene las imágenes de Cristo crucificado en el anverso y la Virgen en el reverso.

La idea de poner un cruceiro en el aeropuerto de Vigo, según se recogía en las páginas de FARO DE VIGO en 1971, fue del entonces director de la terminal olivica, Santiago Martínez Zárate.

7. Un día histórico: 1.000.000 de pasajeros anuales

Que Peinador alcance un millón de pasajeros anual no es noticia actualmente. De hecho, sí lo fue que bajara de esa cifra durante la última crisis económica y las posteriores "guerras" de subvenciones a aerolíneas de los últimos años.

¿Cuándo se consiguió por primera vez sumar 1 millón de pasajeros anual? Fue en 2005. De hecho, AENA premió a la viajera que el 24 de noviembre de ese año contribuyó, sin querer, a hacer historia en el aeropuerto de Vigo. Se trataba de una edil socialista de Almonte (Huelva).

¿Cuál fue el récord? El techo del Aeropuerto de Vigo está en 1.405.968 pasajeros anuales conseguido en 2007.

8. ¿Cuál fue el avión más grande que operó en Peinador?

Muchos lo han confundido este año con el Antonov 225 ucraniano destruido por Rusia en la guerra contra Ucrania. Era el más grande del mundo. En este caso se trata de uno de sus hermanos pequeños, aunque de pequeño no tiene nada: sigue siendo uno de los aviones de mayores dimensiones que existe.

Se trata de la aeronave más grande que operó en el aeropuerto de Vigo: el Antonov 124 (68,96 metros de largo por 73,3 de envergadura).

El carguero Antonov 124 operó en Peinador en varias ocasiones, entre ellas en los meses de abril y marzo de 2011, cuando realizó toda una serie de viajes para transportar lanchas a Mozambique. También estuvo puntualmente en 2005 descargando helicópteros de Salvamento Marítimo; en 2009 con una cargamento de motores para PSA y en el año 1994.

Su operativa en la terminal olívica fue tan sonada que decenas de curiosos subieron al aeropuerto de Peinador para presenciar tanto sus aterrizajes y despegues como las operaciones de carga.

Pero entre los colosos del aeropuerto de Vigo también hay aviones de pasajeros. Algunos incluso llegaron vacíos. Puedes conocer todos los gigantes de Peinador a través de este enlace.

9. Un milagro que mejoró la aviación

Un fuerte impacto le hizo perder el tren de aterrizaje, el avión de Aviaco se arrastró literalmente a lo largo de la pista del aeropuerto de Vigo, el depósito de combustible se rompió y la nave acabó envuelta en llamas. Fueron minutos de angustia. La magnitud del impacto hizo temer lo peor. Fue el accidente aéreo más grave de los ya casi 67 años de historia de la terminal olívica. Por fortuna, todo quedó en un susto. Fue un milagro. Pero no uno cualquiera. De algún modo sirvió para que se introdujeran recomendaciones y mejoras en la aviación, concretamente en la navegación aérea, para evitar que volviera a pasar algo similar. Ocurrió el 21 de marzo de 1994.

Puede ver una amplia galería de fotos de ese día, los testimonios de los afectados, el informe completo de la CIAIAC sobre lo ocurrido, los avances que supuso en materia de aviación la investigación sobre este suceso aéreo en Vigo y hasta un vídeo con una recreación del accidente en este enlace.

10. La terminal de Jenaro de la Fuente que quedó en boceto

A finales de 1920 el Gobierno tenía previsto construir un aeropuerto en las Gándaras de Budiño (O Porriño). Pero el proyecto no terminó de arrancar. En 1936, con el estallido de la Guerra Civil, fue cuando se se quiso relanzar. El geógrafo Francisco Senac acudió a la zona con militares para ver si se podía hacer una pista para el despegue de unos cazas que iban a llegar en barco a Vigo. Pero la zona estaba inundada.

De camino a Valladares, donde iban en busca de otros terrenos, vecinos de Mos se ofrecieron a mostrarles los de Peinador. José Lorenzo Taibo, que tenía una casa de comidas, les entregó un rudimentario boceto que le había hecho Jenaro de la Fuente. Los técnicos validaron aquella propuesta que daría lugar al levantamiento de Peinador en su enclave actual, pero aquel diseño nunca pasó del papel.

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