Augas de Galicia eliminó tres puntos de vertido de aguas residuales en la parroquia de Cabral, hacia el Pepín, afluente del río Lagares. El foco fue identificado en el marco de las inspecciones de rastreo realizadas por los técnicos del programa de control de vertidos autonómico. Para solucionarlo, se instaló un nuevo colector de saneamiento en la avenida de A Ponte, que permitió la conexión de las viviendas de las que procedían los vertidos.