Leixões pesca en la crisis logística y vuelve a embarcar vehículos cuatro años después

El puerto luso empieza a exportar modelos Volkswagen fabricados en el país

REDACCIÓN

El colapso en los puertos especializados en el tráfico Ro-Ro de vehículos, como el de Vigo, está beneficiando a otras terminales sin tradición apenas en este negocio. Es el caso de Leixões en Portugal, que cuatro años después ha vuelto a embarcar coches fabricados por Volkswagen en la planta de Autoeuropa en Palmela debido a la congestión en la terminal de Setúbal. Se trata de un servicio regular de un convoy diario a cargo de las compañías Rodocargo, Pecovasa y Medway.

La crisis logística tiene una especial incidencia en Vigo, donde la terminal de Bouzas vuelve a estar a rebosar de vehículos (tiene una capacidad de algo más de 20.000 unidades), al igual que la campa de Stellantis en Porriño, lo que ha obligado a activar depósitos alternativos en As Gándaras, Salvaterra, Redondela e incluso en Teis (en la antigua parcela de Campsa). Y lo mismo ocurre en los alrededores de Setúbal, donde no queda más espacio para estacionar los vehículos que Volkswagen-Autoeuropa produce en Palmela. Esta situación ha beneficiado a Leixões, el gran rival de Vigo en la fachada atlántica, con un servicio regular de exportación, aunque la terminal lusa no tiene espacio suficiente para el movimiento de los convoyes y el almacenamiento de coches Por ahora.