La mujer hallada en una playa de Alcabre tenía 73 años y murió por ahogamiento

El miércoles al mediodía una mujer era hallada muerta en una playa de la parroquia viguesa de Alcabre. Durante más de 24 horas su nombres y apellidos fueron un enigma para la Policía Nacional. No llevaba documentación ni teléfono móvil que pudieran aportar pistas sobre ella y las joyas que portaba tampoco tenían signos distintivos que ayudasen a esclarecer la incógnita. Pero una denuncia por desaparición interpuesta por su compañero sentimental y la confirmación de su identidad a través de las huellas dactilares permitieron que avanzado el jueves se pudiera aclarar todo. La víctima tenía 73 años de edad y el examen forense determinó que murió por ahogamiento: su cuerpo apareció flotando en el agua, de donde, tras el hallazgo, fue sacado inmediatamente hacia la arena para evitar que la arrastrase la corriente mar adentro.

Aunque fuentes del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) apuntaban el mismo miércoles que todo apuntaba a una muerte por causas naturales, finalmente la hipótesis de la Policía Nacional es que se habría quitado la vida. Lo que estaba claro desde el principio es que no había signos de violencia. Al parecer, la mujer era natural de Pontevedra y vecina de Vigo. Su cadáver fue encontrado concretamente en un arenal de Alcabre que hay al final de la calle Roade, casi en el límite con Bouzas y cerca del Museo del Mar. Hasta el punto acudieron varias patrullas de la Policía Nacional, así como la médica forense, tras lo cual el cuerpo fue trasladado al Hospital Nicolás Peña para la realización de la autopsia. Las pertenencias de la fallecida quedaron en custodia del juzgado, que ya las entregó a su familia.