Susto en Castrelos a primera hora de la mañana. El desprendimiento de un muro en la Subida á Costa a la altura del número 13 (justo debajo de los edificios de la Colina de Castrelos) ha obligado a movilizar a bomberos y Policía Local y a cerrar por completo la circulación de este vial al tráfico. "El ruido fue como una bomba", relatan a este periódico los vecinos de la zona.
El derrumbe ha sido de tal magnitud que las piedras y la tierra han caído sobre la calzada obligando a cortar por completo la calle al tráfico. En ese momento no pasaba nadie caminando. "Fue de milagro, porque por este calle pasan muchas personas y sobre todo a primera hora, cuando lo hacen muchos niños que van al colegio Mestres Goldar", explica Elena Estévez, que vive junto al muro que se vino abajo.
De hecho, los vecinos aseguran que el peligro de que este muro se desprendiara había sido ya notificado al Concello de Vigo varias veces durante al menos los tres últimos años sin que —aseguran— se tomaran medidas. También inciden en que se alertó también del riesgo de que varios árboles que hay más arriban puedan caer sobre la carretera.
Según se relatan los testigos, solo un coche ha sufrido daños por el desprendimiento del muro. El vehículo circulaba en sentido ascendente justo cuando todas las piedras cayeron sobre la carretera.
"Pudo haber sucedido algo más grave. No solo porque por aquí pasan muchas personas caminando, sino porque es una calle con mucho tráfico hacia el colegio o el hospital", relatan varios vecinos de Subida á Costa.
Los bomberos solicitaron una pala del parque municipal para poder retirar el barro y las piedras en las próximas horas y poder reabrir la calle. Ahora tendrá que pasar un técnico municipal para evaluar los daños y valorar si la zona debe quedar acordonada.
