Un tren procedente de Madrid llegó este miércoles a la estación de Vialia con una pasajera muerta. La alerta saltó ya en Vigo, cuando, al vaciarse el vagón, comprobaron que la mujer, de 66 años y que viajaba sola, seguía en su sitio y no se movía. Dado que llevaba mascarilla y tenía los ojos cerrados, inicialmente se pensó que estaba dormida, pero, al no reaccionar, otro viajero, sanitario de profesión, comprobó que no tenía pulso, según informaron fuentes de la Policía Local. Los sanitarios del 061 intentaron técnicas de reanimación, pero ya solo pudieron certificar el fallecimiento, que se produjo durante el viaje.

La pasajera, domiciliada en Vigo, viajaba desde Madrid. El tren había partido a las 11.20 horas y tenía su llegada a Vigo prevista a las 15.38 horas. La Policía Local recibió la alerta a las 15.52 y, hasta el punto, además de estos agentes, fue Policía Nacional y 061. Los agentes municipales intentaron localizar a la pasajera que fue sentada al lado de la fallecida, por si había notado algo durante el viaje que pudiera aportar alguna pista sobre el momento en el que se produjo la muerte, pero no lo lograron ya que no está empadronada en Vigo y carecían de teléfono de contacto. De las diligencias se hizo al final cargo la Policía Nacional. Fuentes de Renfe confirmaron el luctuoso suceso e indicaron que, dado que ese tren quedó parado hasta que se produjo el levantamiento del cadáver, los viajeros que salían esa tarde hacia Madrid viajaron en otro de media distancia hasta Ourense y allí subieron al Alvia con destino a la capital española.