Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El mapa vigués de la vida extraterrestre

Dos grandes telescopios de EE UU rastrean una estrella de la Vía Láctea en busca de una civilización alienígena siguiendo la hipótesis de Alberto Caballero sobre el origen de Wow!

Anotación de la señal detectada en 1977 por un radiotelescopio de Ohio y bautizada como Wow!. |

Dos de los mayores telescopios del mundo a los que tiene acceso la comunidad científica han fijado las coordenadas de una estrella situada a 1.800 años luz de la Tierra para rastrear la presencia de vida inteligente siguiendo la hipótesis del vigués Alberto Caballero. Este astrónomo aficionado captó la atención mediática de todo el planeta hace dos años al plantear que dicho cuerpo celeste podría ser el origen de Wow!, una misteriosa señal detectada en 1977 y que podría haber sido emitida por una civilización extraterrestre a falta de otra explicación sobre su procedencia.

Caballero localizó la estrella en cuestión en la base de datos del Archivo Gaia de la ESA tras analizar aquellas de la Vía Láctea, nuestra galaxia, que contaban con más probabilidades de estar habitadas por una civilización alienígena. Es decir, eran similares al Sol y tenían planetas orbitando en torno a ellas comparables a la Tierra.

Alberto Caballero. // FDV s. penelas

Su estudio, el primero que planteó una solución al enigma de Wow! en más de cuatro décadas, fue publicado este mismo año en la revista Journal of Astrobiology, del servicio de publicaciones de Cambridge. Y, sin duda, llamó también la atención de Breakthrough Listen, la organización que ha liderado el proyecto que ha involucrado al Green Bank Telescope y al Allen Telescope Array (ATA) del Instituto SETI (Search for extra terrestrial intelligence).

“El multimillonario que lidera Breakthrough Listen comentó en su momento que mi artículo le parecía muy interesante y supongo que le habrá dicho a su gente que buscase datos específicos sobre esa estrella. La búsqueda tuvo lugar en mayo y los datos se presentaron hace un mes en un congreso internacional. Me impresionó bastante porque es la primera vez que hacen una búsqueda tan concreta. Siempre se había escaneado esa región del cielo de manera general”, destaca Caballero.

Un multimillonario que lidera proyectos de búsqueda de vida inteligente

El inversor ruso Yuri Milner fundó Breakthrough Initiatives en 2015 para impulsar proyectos de búsqueda de vida inteligente contando con el apoyo, entre otros, del ya desaparecido Stephen Hawking y de Mark Zuckerberg, así como con la colaboración de expertos de las principales universidades e instituciones de investigación.

“Junto con el SETI, que mantiene su actividad en mayor secreto, es una de las organizaciones privadas más grandes del mundo con este propósito. Invierte grandes cantidades de dinero en proyectos con gran repercusión como el envío de nanosatélites a los planetas más cercanos y Breakthrough Listen es una de sus líneas”, explica Alberto Caballero.

“En este proyecto han utilizado por primera vez de forma conjunta los dos telescopios, el de Green Bank y el ATA. Es algo que tampoco me esperaba y que me sorprendió”, reconoce.

Rastreo de tecnomarcadores

Tras el colapso del radiotelescopio de Arecibo (Puerto Rico) en 2020, que también pertenecía al SETI, ambos complejos, situados en los estados de Virginia Occidental y California, respectivamente, son de los mayores del mundo. “El de China es incluso más grande, pero no es accesible para la comunidad científica internacional”, explica Caballero.

“Los autores del trabajo buscaron tecnomarcadores, es decir, cualquier tipo de señal que indique la presencia de una civilización avanzada como la nuestra. Utilizaron radioseñales y analizaron varias frecuencias”, detalla sobre la búsqueda realizada en la estrella 2MASS 19281982-2640123, situada en la constelación Sagitario.

Exploración infructuosa

La exploración no arrojó ningún indicio de inteligencia. Algo esperado para Caballero: “El resultado era obvio porque realmente estuvieron buscando muy poco tiempo. Uno de los telescopios observó una hora en total y el otro unos 30 minutos. Y buscaron juntos durante diez minutos. En un periodo tan corto es imposible detectar nada. Supongo que probaron para ver si había suerte y se estuviese enviando una señal de manera continua. Pero emitir una señal tan potente de forma repetida es muy improbable”.

Los expertos de Breakthrough Listen, que buscaban por primera vez la señal Wow!, cuentan con una lista de estrellas de interés en la misma región en la que podrían seguir rastreando. Pero, por el momento, no han dado a conocer sus próximos pasos.

Mientras tanto, Alberto Caballero, que es criminólogo y realiza su doctorado en la UVigo, sigue trabajando de cara a su futura publicación en el artículo que elaboró sobre la posibilidad de que una civilización maliciosa atacase la Tierra, otro trabajo que alcanzó gran repercusión este verano.

Compartir el artículo

stats