La activación por parte de la Xunta del calendario para poner en servicio la estación intermodal en el próximo mes ha vuelto a provocar un desencuentro con el Concello. La edil de Urbanismo, María Xosé Caride, salía al paso de la visita del gobierno autonómico con las operadoras a la terminal reclamándoles “que no molesten” y “no entorpezcan la construcción” del ascensor HALO entre García Babrón y Vialia.

Marta Fernández-Tapias denunció el lunes que la cimentación de los apeos de esta estructura sobre la AP-9 fue la causa del retraso hasta noviembre en su apertura, aunque según se constató en la última comisión de seguimiento estos trabajos ya habrían llegado a su fin y podría liberarse el ramal de acceso para comenzar a utilizarlo en diciembre si hay acuerdo.

Caride apuntaba a que el ascensor permitirá conectar una zona de la ciudad densamente poblada con las dos estaciones gracias a una inversión de 12,6 millones de euros ejecutada entre el ayuntamiento y el Gobierno de España con los fondos europeos de recuperación.

La delegada de la Xunta en la ciudad enmarcó estas declaraciones del gobierno local en “continuar con su estrategia de boicot” e impedir la apertura de la intermodal. “Dice ahora el Concello que la Xunta entorpece los trabajos, ya era lo que nos faltaba por oír, ahora le dice la sartén al cazo que somos nosotros los que ponemos trabas” aseguró Tapias al recordar que está lista desde el 10 de junio.