Después de dos años en los que la pandemia también ha cambiado la forma de despedir a nuestros seres queridos y honrarlos, los cementerios vuelven a vivir sus jornadas más intensas ante la proximidad del Día de Todos los Santos y Difuntos.
El buen tiempo permitió que durante todo el domingo los familiares y allegados de los difuntos pudieran acercarse hasta estos recintos para prepararlos de cara a estas fechas tan señaladas. Cepillos para limpiar las lápidas, reposición del agua en los jarrones y las flores o nuevas velas fueron algunos de los trabajos que se pudieron ver a lo largo de todo el domingo.
Este trasiego de visitantes desde el viernes llegará a su punto álgido durante los próximos tres días. En Vigo el Concello ya ha anunciado que siete cementerios municipales abrirán en horario ininterrumpido desde las nueve de la mañana hasta las seis y media de la tarde ante una afluencia que será masiva.
Además, Vitrasa reforzará las líneas de autobús de transporte público que conectan con estos camposantos “según la demanda de los viajeros”.
