Hay una infraestructura existente, hay demanda social y hay cifras de uso que lo apoyan. El eje ferroviario entre Vigo y Pontevedra cumple con todos los requisitos para la constitución de un núcleo de cercanías o un “servicio ferroviario de proximidad” como los cinco incluidos en los Presupuestos Generales del Estado y que la secretaria de Estado de Transportes, Isabel Pardo de Vera, aseguró que encajarían con la configuración demográfica gallega: “Si nos dan un interlocutor, tenemos ideas piloto que nos sale un proyecto estupendo” aseguraba a FARO.
Según recoge el Informe del Observatorio del Ferrocarril de 2019, Vigo (1.162.795 y 12ª) y Pontevedra (822.882 y 16ª) ya figuran entre las ciudades con más pasajeros de Media Distancia a pesar de que sus conexiones son más limitadas que en el resto de Galicia.
A las dos urbes habría que sumar los 74.310 viajeros registrados en las tres estaciones de Redondela (la histórica, el apeadero de Picota y la de Alta Velocidad) y los 40.290 de Arcade, que también se beneficia de los servicios del Eje Atlántico.
En total, más de dos millones de pasajeros en relaciones de Media Distancia –incluyendo los trenes hacia Santiago o A Coruña– sin tener todas las frecuencias o reducciones en los precios con las que sí que cuentan otras áreas metropolitanas.
En 2020 la pandemia redujo a la mitad estas cifras, pero al mismo tiempo demostró que son pasajeros que dependen del tren para trabajar y estudiar: solamente entre estos cuatro municipios movieron uno de cada treinta pasajeros de estos servicios en toda España.
Desde la asociación Tren Media Distancia Galicia creen que estos serían el complemento perfecto a los que han convertido a la línea entre A Coruña y la estación de Urzáiz en la segunda más utilizada de España. “Por nuestra experiencia, si se amplían tendrían muy buena acogida” señalan.
Un estudio de Ineco para el Gobierno del 2017 cifraba en 20.000 viajeros diarios el umbral mínimo para poder constituir un nuevo núcleo de Cercanías, una cifra lejos de cumplirse en la mayor parte de la red que ha excluido al área alrededor de la ría de Vigo.
La gran conurbación entre Oviedo, Gijón y Avilés se quedó en 2019 en 12.876 usuarios diarios; seguido por o el eje entre Alicante y Murcia (9.484) o la Bahía de Cádiz (7.671). Cierran las estadísticas la red de Zaragoza, creada en 2008 y con apenas 821 viajeros diarios.
Trenes también por el Miño: la propuesta metropolitana
Recogiendo el guante de la secretaria de Estado y Medalla de Oro de la ciudad, Abel Caballero aseguró que para Vigo sería “absolutamente interesante” contar con estos servicios de proximidad y proyectos de movilidad propuestos.
El regidor cree que son “el futuro del transporte urbano y hay que volcarse ahí”; pero los enmarcaba en el Área Metropolitana creada en 2016 con otros 13 concellos y que la Xunta recurrió.
Además de los ya citados, otros municipios como Porriño, Salceda de Caselas y Salvaterra do Miño ya cuentan con una infraestructura hacia Vigo que podría disponer de más frecuencias que los dos trenes diarios actuales por sentido.
Estos “cercanías” por la línea del Miño podrían tener un ramal hacia Tui y Valença. Ambas localidades contaban con 3 frecuencias diarias declaradas como Obligación de Servicio Público y que aún no se han recuperado.
En la localidad lusa se podría enlazar con los Intercidades hacia Oporto o Lisboa, cuyo viaje emplea cinco horas. “Sería mucho mejor sistema y más barato que el actual” sentencia Caballero, que abre la puerta “sin ninguna duda” a combinaciones entre tren, bus o barco.
