La demanda de instalaciones fotovoltaicas de autoconsumo para empresas, así como entre el sector residencial, está experimentando un aumento exponencial en Galicia con el claro objetivo de optimizar el ahorro energético y rebajar los costes de la factura de la luz.
Industria y particulares se encuentran inmersos en la búsqueda de alternativas para hacer frente a los estragos que está causando la crisis energética actual y muy especialmente dentro del área de Vigo, puesto que ya constituye la ciudad gallega que registra un mayor volumen de solicitudes de subvenciones autonómicas para instalaciones de paneles solares. Lo revelan así los datos compilados por la Consellería de Economía, Industria e Innovación que, en el marco de las ayudas destinadas a la implantación de módulos fotovoltaicos, ha recibido un total de 229 peticiones procedentes de la ciudad olívica, que aglutinan las líneas de subvenciones dirigidas a empresas, particulares y energías térmicas, de biomasa y fotovoltaica.
Esta cifra supone prácticamente un 40% del total de las solicitudes que el departamento autonómico deberá evaluar a partir de ahora antes de conceder las aportaciones económicas correspondientes, y también implica casi el doble de peticiones con respecto a la segunda ciudad gallega más demandante que, en este caso, es Santiago de Compostela con 119. El ranking lo completan Pontevedra con 73 solicitudes, Lugo con 52, Ourense con 48, A Coruña con 44 y Ferrol con 23.
Este cómputo no es de extrañar, puesto que empresas especializadas en el sector afirman que, solo en el último año, la contratación de instalaciones fotovoltaicas se ha llegado a disparar hasta un 50% en el ámbito residencial. Lo corroboran así desde la empresa de eficiencia energética Voltfer, del Grupo Alvariño, desde donde su director, José María Fariña, afirma que “si en los últimos años ya veníamos detectando una mayor demanda desde el sector industrial y comercial, el incremento en los últimos meses por parte de particulares ha sido brutal. No dejan de llegarnos llamadas y solicitudes de presupuesto y, con respecto al 2021, si antes teníamos que hacer una labor comercial, ahora mismo podemos decir que el volumen de llamadas ha aumentado un 200%”.
Asimismo, José María Fariña destaca que “también estamos recibiendo muchos contactos por parte de edificios que se interesan por la posibilidad de instalar los paneles de forma comunitaria, pero nosotros, en el ámbito residencial, lo que más trabajamos son viviendas unifamiliares. En una zona comunitaria la instalación no es tan adecuada porque suele haber poca superficie de cubierta y no compensa para repartir entre muchos vecinos”.
Esta gran demanda se explica por la incesante escalada de los precios de la luz y, de hecho, el director de la división del Grupo Alvariño especializada en instalaciones fotovoltaicas de autoconsumo indica que “cada vez que en los medios de comunicación se recoge que ha subido el precio de la electricidad, al día siguiente tenemos muchas más llamadas y solicitudes”.
Ahorro energético
La firma, con sede en Vigo, ha desarrollado más de 200 instalaciones, sobre todo para industrias y empresas de distintos sectores, pero también en áreas residenciales. Los parques fotovoltaicos instalados por Voltfer suman en su conjunto una potencia superior a los 10 MW y, en el caso de las viviendas unifamiliares, trabajan principalmente los de autoconsumo instantáneo o instalaciones con baterías, por un coste de unos 6.000 y 12.000 euros, respectivamente.
Tras la inversión inicial, dependiendo de cada caso, estas instalaciones en empresas e industrias aportan de media el 25% de la energía que consumen para su actividad, y a este importante ahorro se suman los beneficios ambientales, con una reducción muy destacable en la huella de carbono. En cuanto a las instalaciones en el sector residencial, el ahorro puede alcanzar el 70%, dependiendo de las características de los módulos fotovoltaicos y de si incorporan o no baterías para el almacenamiento de la energía.
