Candelas Varela, la enfermera viguesa infectada de malaria en el Congo, ha salido de la UCI de la Clínica de Navarra en Madrid, donde ingresó de urgencia hace casi dos semanas, y ya se encuentra en planta. En un vídeo compartido por su hermano Jacobo en Instagram, la sanitaria, aún con la voz ronca, agradece el apoyo recibido durante las últimas semanas: “Como veis, ya estoy muchísimo mejor, ya estoy en planta. Me ha cambiado la cara, ya soy otra. Y todo es gracias a vosotros”.
La sanitaria, que trabaja desde hace 25 años en el Hospital Monkole de Kinshasa, tuvo que ser evacuada de urgencia en un avión medicalizado ante el agravamiento de su estado de salud. Las donaciones recibidas permitieron sufragar el costoso traslado y el tratamiento que está recibiendo en España desde su llegada le ha permitido experimentar una favorable evolución. “Todo es gracias a vosotros, a vuestros rezos, a vuestra energía positiva, a vuestra ayuda”, agradece en el vídeo.
Su solidaridad y sus lazos con el país africano son tan grandes, que la enfermera viguesa ya está inmersa en un nuevo propósito, crear una unidad de diálisis en Monkole. La ausencia de este equipamiento fue la razón que forzó su repatriación a España, ya que la infección de malaria le causó daños en el hígado y el riñón.
“Quiero abrirla con ayuda de todo los trabajadores de Monkole, pero también con toda la gente que quiera colaborar. Porque fue lo que necesité y no había”, explica desde la cama del centro hospitalario donde permanece ingresada.
La Fundación Monkole, que ya puso en marcha la campaña para sufragar el traslado de la enfermera viguesa, será la encargada de gestionar los fondos para poder crear un servicio de diálisis en el hospital africano. “Son los mejores embajadores”, subraya Candelas, que incluso recuerda que todas las ayudas desgravan.
La familia de la sanitaria también ha querido agradecer todo el apoyo recibido en las últimas semanas. Y aunque conocen muy bien la vocación solidaria y el tesón de Candelas, no dejan de admirar su constante afán por seguir ayudando. “Es de otra pasta”, aplauden.
La enfermera viguesa, que desde 1997 está involucrada en proyectos de ayuda a niños, mujeres y personas vulnerables, llegó a Madrid el pasado 4 de septiembre. Su hermano Juan compartía horas antes el estado de incertidumbre en el que se encontraba toda la familia ante la falta de un diagnóstico claro y recordaba cómo ella había realizado antes el mismo viaje acompañando a niños del Congo para poder ser tratados en España.
Sus compañeros del hospital africano se desplazaron con ella hasta el aeropuerto de Kinshasa y en el avión, cuidando de ella en todo momento, viajó la doctora María Dolores Mazuecos.
Tras aterrizar en Madrid fue trasladada directamente a la Clínica de Navarra, donde la esperaban su madre y tres de sus hermanos . Pasó su primera noche tranquila en la UCI y los primeros reconocimientos médicos constataron que tenía dañados varios órganos, así como una cardiopatía. Ya en planta, Candelas permanecerá bajo los cuidados de los facultativos de Cardiología y Medicina Interna mientras avanza en su recuperación.
