La Inspección de Trabajo de Vigo ha resuelto, “a través de una actuación muy amplia y rigurosa”, que los supuestos particulares a través de los que Amazon realizaba repartos eran, en efecto, trabajadores y, en consecuencia, el gigante de la venta online debe abonar las cotizaciones de los mismo en el Régimen General de la Seguridad Social.

Así lo explicaban en comunicado de prensa desde UGT, apuntando que, tras la investigación, no hay duda en que "la relación era laboral y no mercantil".

A día de hoy, ya se ha ordenado desde el organismo de inspección que se curse el alta retroactiva de los trabajadores en el régimen general de la seguridad social.

Desde que AMAZON se instaló en O Porriño, han sido varias las denuncias planteadas por el sector del transporte de UGT Vigo, que ha entendido que incumple de forma manifiesta la legislación laboral vigente en nuestro país.

La multinacional del envío a domicilio había creado este novedoso sistema por el cual ofrecía a los particulares la posibilidad de aumentar sus ingresos mediante el reparto de sus paquetes empleando sus vehículos particulares. Desde UGT denunciaron que esa idea no se ajustaba a la legalidad, y que la relación entre estas personas y AMAZON era “una clara relación laboral”.