Para muchos hoy ha sido la última mañana de sus vacaciones. El día de playa antes de volver a la rutina. Pero el plan se vino a bajo por una protagonista a la que nadie había invitado: la niebla. La falta de viento en las Rías Baixas ha provocado que Vigo haya amanecido este 28 de agosto sumido en una profunda bruma que no dejaba pasar los rayos de sol. Por momentos se hacía imposible ver más allá de 30 metros. La situación meteorológica propició, además, que los termómetros tardasen más de lo habitual en desperezarse. El mercurio marcaba los 16º a las 8.30 horas, algo completamente inusual en este agosto marcado por el calor y la sequía.

Las nieblas han acompañado a los vigueses a lo largo de toda la mañana. Han comenzado a disiparse en las horas centrales del día, pero sin llegar a irse del todo y mitigando las temperaturas hasta un máximo de 24º, lo que no ha impedido que muchos se hayan animado a volver a la playa.

Vecinos y turistas recorren Praia América en una mañana nublada Marta G. Brea

Mientras, el resto de Galicia se encuentra este domingo en una situación meteorológica muy indefinida, con las altas presiones muy lejanas pero aún con aire cálido en superficie y zonas de aire frío en altura por lo que no habrá cambios de temperaturas, según Meteogalicia.

Vista desde San Miguel de Oia con los picos más altos de las Cíes sobresaliendo a la niebla MARTA G. BREA

Esto ha dejado un panorama de cielos poco nubosos al principio, con nubes de evolución y tormentas aisladas por la tarde en el interior. Para mañana, lunes, se espera un leve descenso de las tempoeraturas.