El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia acaba de desautorizar el último proyecto de rehabilitación de uno de los edificios más céntricos de la ciudad, ubicado en el número treinta y uno de la calle Colón. La sentencia del alto tribunal gallego llega tras el intento de la promotora Hispania Trust Enterprise de luchar contra la resolución de la Consellería de Cultura y Turismo por la que se denegó la autorización para el proyecto reformado básico y de ejecución del edificio ubicado justo delante de la Farola.
El fallo judicial llega casi dos años después de que la Concellería de Urbanismo, a instancias de un informe negativo de la Dirección Xeral de Patrimonio Cultural de la Consellería de Cultura e Turismo, denegase la licencia de un segundo proyecto de reforma diferente del original.
Y es que, realmente, en el año 2018, la promotora ya había logrado el visto bueno de las administraciones local y autonómica. Aquel plan se basaba, a grandes rasgos, en conservar la fachada principal y posterior sin desmontarla y vaciar por dentro todo el edificio. De aquella intervención autorizada resultaría un predio con 1.622 metros cuadrados de superficie construida, repartidos entre planta semisótano para trasteros y un local comercial, una planta baja para local comercial y accesos, plantas primera y segunda para una oficina y una vivienda por altura, plantas tercera y cuarta con un piso cada una y la quinta altura y el aprovechamiento bajo cubierta servirán para habilitar un dúplex. El permiso de Urbanismo estipulaba que el inicio de las obras no podía exceder de seis meses o se daría por caducado. Y vaya si se excedió. Ya con las obras en marcha, la promotora presentó un segundo proyecto enmendando el anterior que ni Xunta ni Concello autorizaron. Llegó entonces la guerra judicial donde, de nuevo, la constructora se ha llevado otro varapalo.
Una historia de desdichas
La trayectoria de este edificio centenario es singular. Jenaro de la Fuente lo firmó en 1908, hace ahora más de un siglo. Curiosamente y según las crónicas de FARO de la época, cuando tenía menos de un año de vida, sufrió un grave incendio que copó la portada del decano entonces. “En menos de una hora, quedó ayer completamente destruido uno de los edificios más hermosos del Vigo moderno”, rezaba la entradilla. Aunque no hubo que lamentar heridos de gravedad, el humo del potente incendio era visible desde muchos puntos de la ciudad. En menos de una hora, la calle Colón se colapsó de ciudadanos curiosos, pero también solidarios que quisieron mostrar su disposición a ayudar a quien lo necesitase. Ya en nuestro siglo, el edificio sufrió sendos derrumbes en 2016 y 2018.