El auditorio de Castrelos vivió en la noche de ayer una de sus jornadas más multitudinarias del verano, ya que los fans de Dani Martín abarrotaron el parque vigués para disfrutar de los grandes éxitos del exlíder del Canto del Loco. Sin embargo, lo que fue un fin de fiesta batiendo el récord de asistencia pudo haber terminado en tragedia al desplomarse un árbol "muy seco" cerca de la entrada principal del parque olívico.

Fue en el entorno de las 22.35 horas, poco después de que el cantante madrileño iniciara su actuación en el auditorio vigués, cuando un árbol situado en la entrada principal del parque se desplomó de raíz sobre la verja del cierre perimetral del recinto, quedando la copa sobre un paso de peatones y muy próximo a la fuente de la entrada.

Afortunadamente, en aquel momento no pasaba por la zona ningún viandante y no hubo que lamentar una tragedia, si bien dos agentes de Policía estaban presentes en las inmediaciones y al escuchar el ruido del árbol cuando empezó a desplomarse, tuvieron tiempo a escapar y ponerse a salvo.

El árbol sobre la verja del cierre del parque de Castrelos. FdV

Tras el incidente, protagonizado por un árbol que según aseguraron los efectivos estaba "muy seco", procedieron a precintar la zona y dieron aviso a los Bomberos y al servicio de limpieza municipal para retirar el espécimen y acondicionar el lugar.

El concierto de Dani Martín era el espectáculo que ayer ponía fin a la programación del "Vigo en Festas", que a punto estuvo de escribir un desenlace similar al vivido en la edición del año 2018 en O Marisquiño, cuando la plataforma de madera del Puerto, situada frente a la sede de la Xunta en Vigo, cedía en medio del concierto de Rels B.

Afortunadamente, a la hora a la que se produjo el incidente, la actuación del cantante madrileño ya había comenzado y no hubo que lamentar heridos.

Un ejemplar de 40 años bajo vigilancia

Horas después del incidente y tras hacer balance de todos los conciertos celebrados este verano en Castrelos, el alcalde de la ciudad detalló las condiciones en las que se encontraba este sauce llorón de 40 años de edad.

Abel Caballero detallaba que el ejemplar, de entre ocho y nueve metros de alto, ya se encontraba bajo seguimiento por parte de los servicios municipales que habían recomendado intensificar su vigilancia. "Aunque a muchos le cueste entenderlo, los árboles tienen un período de vida" señalaba.

Es por ello que en el mes de julio y tras un primer informe "se le podó severamente" para aligerarlo de peso, una medida insuficiente dado el origen del problema que desencadenó el incidente de ayer. La red reticular de las raíces "estaba débil" y por ello, a pesar de que el tronco y las ramas del magnífico ejemplar se encontraban en buen estado, acabó cediendo ante la verja que delimita el parque municipal.

El regidor añadió que dentro de los 1.250 ejemplares presentes en él, hay un total de 70 que se encuentran en seguimiento activo ante el riesgo de derrumbe. Para ellos el Concello ya ha solicitado el permiso de Patrimonio para actuar sobre ellos y reponerlos con otros "90 o 100 más".

Al mismo tiempo, Caballero lamentó que "alguna gente hace demagogia" con esta cuestión ya que "el problema no estaba en el tronco, que estaría perfecto si se cortaba y eso no lo pueden detectar los técnicos".

En ese sentido, la Concellería de Parques e Xardíns ha instalado numerosos carteles con bridas en árboles de gran porte de la ciudad desaconsejando las actividades bajo su ramas. Siguiendo las directrices de la FAO, señalan que los cambios de temperaturas sufridos estos meses han producido "estrés hídrico" en los ejemplares, por lo que el riesgo de colapso se ha incrementado.