No serán pocos los vigueses de varias generaciones que han entrado en los secretos del dibujo técnico de la mano del vigués Fernando Ferreira D’Oliveira (1912-2020), bien en su vivienda-estudio de la calle Tercio de Afuera o en la Escuela Municipal de Artes y Oficios, Colegio San José de Cluny, Hermanos Maristas... La recepción de un cuadro suyo en el Museo de Castrelos me hizo preguntarme cuán injustamente olvidados están algunos de nuestros vigueses ilustres, aunque no falte su nombre en el mastodóntico trabajo del periodista González Martín. De sus cuatro hijos, tres son los angelitos del mural de la iglesia de las Trinitarias viguesa y uno de ellos es Fernando Ferreira autor del magno libro Crónicas de un Vigo ye-yé. Al padre, del que hablamos, se le conoce por la docencia pero fue pintor, dibujante publicitario, fabricante y coleccionista de soldados de plomo, cineasta (tuvo una productora) y notable narrador de historias. Y como artista nos dejó obras en iglesias como las Trinitarias, Fátima, Convento de las Salesas en las Coutadas y Residencia de los Ancianos Desamparados. ¿Imagináis lo interesante que pudo ser su vida tan variada y que aquí solo puedo esbozar? Memoria olvidada de Vigo en años de expansión. Grande este Ferreira.

Rosa y Daniela, cariños míos

Extraña sensación del paso del tiempo la que sentí el otro día, cuando oyendo Radio 3 mientras conducía por tierras castellanas apareció en una entrevista la voz cálida de la viguesa Daniela Díaz Costas, Dani, y me asombró la madurez con que respondía a las preguntas sobre su vida artística. Claro, me dije después ¿cómo no una mujer de 26 años? La culpa era mía porque parece que fue ayer cuando su madre, Rosa Costas “Aerolíneas”, me llamó para hablarme de su hija que empezaba; ayer cuando su padre Silvino me escribió el capítulo de la música viguesa de los 80 para mi libro sobre la historia de la moda gallega... pero ayer también cuando, en los 80, los vi nacer a los dos como Aerolíneas Federales y ensayar en el bajo cedido de mi casa. ¡Padres y, ya, hijos!

Te veo en la Casa de Aldán

Hoy tendría que estar, a las 8, en la Casa de Aldán. ¿Cómo no si se ofrece allí el único de los Martes musicales de este año, esa música de atardecer que desde 2005, organizada por Marisa Barrio como alma mater de la casa y ayudada antes por gente como Ventura Pérez Mariño, constituyó la cita de ese día de todos los martes agosteños? Siempre tuvo una audiencia muy de veraneo entre la que se podía ver al periodista y escritor Javier Rioyo, al que fue director del Teatro Real de Madrid, Miguel Muñiz… Hoy escucharemos a Ensemble Fusion Atlántica (Mozart para flauta y trío de cuerda) mientras el sol se pone. Pero en el pasado se aplaudió allí desde a Manuel Soto y Puri del Palacio, que inauguraron estos martes como cantantes vocacionales, al músico Budiño.

Las Cíes de Lubián. Abrimos agosto con esta foto de inmensa belleza de las Cíes y su playa de Rodas hecha por el fotógrafo vigués Alfonso Lubián, y que en esta primavera cumplió 20 años de su realización, siendo de las más publicadas por empresas (y más pirateadas, dice el autor). No sé si la tomó desde el aire, pero podría. Lubián es el más experimentado conductor aéreo como primer piloto de la comunidad que dirigió un globo, y montó una empresa ofreciendo a incontables personas esa experiencia. Este año, cumplidos los 70, cerró la misma para descansar, pero mirad qué foto nos ha dejado.