La oferta turística no deja de expandirse en la ciudad olívica, cuyos establecimientos hoteleros –tras sobrevivir al impacto económico de la pandemia– han ido in crescendo. A la Casa Acuña Soaje, que el Banco Santander transformará en hotel por medio de diferentes obras que culminarán en dos años, se suman otros recientes buques del sector servicios, como el Attica 21 Vigo Business&Wellness y el Exe Vigo, nacidos después de las peores oleadas virales que recuerda el siglo XXI.
El primero, y más reciente hasta la fecha, se inauguró el pasado 15 de junio y abrió las puertas a sus inquilinos a comienzos de este mes: el 1 de julio. En total, más de 150 habitaciones, spa e incluso un restaurante propio que acoge el número 15 de la Avenida Samil. Por el camino, una inversión que rebasa los 25 millones de euros y la distinción de ser el único negocio de cuatro estrellas superior en la urbe olívica.
El segundo, que vio la luz el 27 de diciembre de 2021, cuenta con tres estrellas y está ubicado en la esquina de Urzáiz con Vázquez Varela. También de estilo moderno, se encuentra en un edificio que fue rehabilitado conservando su esencia. Abandonado durante décadas, tras ser diseñado por Jenaro de la Fuente, Eurostars Hotel Company (cadena hotelera de Grupo Hotusa) está sacando el máximo partido a sus amplias 23 habitaciones.
A ellos se suma ahora el proyecto de la multinacional cántabra liderada por Ana Botín, que a través de su filial RetailCo reconvertirá el edificio singular de Policarpo Sanz 23: primera obra del arquitecto Michel Pacewicz en Vigo, en 1897; residencia del premio Nobel de literatura Camilo José Cela entre 1921 y 1925; y antigua sede del Banco Galicia y, posteriormente, del Banco Popular. La construcción, tal como informó FARO, estará lista en 2024.
“La idea nos parece espléndida porque es la recuperación de un edificio histórico para uso productivo”, confiesa el alcalde Abel Caballero en declaraciones a este periódico. Según fuentes municipales, el uso hotelero de la Casa Acuña Soaje es “compatible” pero goza de un “nivel de protección estructural”.
En este sentido, es preciso para su transformación un informe favorable de la Xunta en materia de patrimonio cultural y, antes de nada, que los interesados presenten una consulta previa en la Comisión de Seguimiento del Plan Especial y Catálogo complementario de edificios, conjuntos y elementos a conservar (PEEC). Por ahora, agregan, RetailCo –que en este proceso trabaja de la mano de las consultoras CBRE y Cushman&Wakefield– todavía no ha iniciado estos trámites. Tampoco han presentado licencia de ningún tipo, aunque en 2021 hicieron consultas demandando información sobre la cédula urbanística, usos, edificabilidad y nivel de catalogación. Después, un arquitecto solicitó acceder a las solicitudes de obra en los años 80 y 90. Tras un tiempo, reclamó esta documentación, pero de los 40 en adelante.
Otra joya turística, en este caso el hotel que se está construyendo en el faro de Cabo Silleiro, también está atravesando su particular fase burocrática. En este caso, conforme indican fuentes cercanas al proyecto, están pendientes del permiso de Puertos del Estado para que informe al Consejo de Ministros y también del permiso de patrimonio de la Xunta. Luego llegará el turno de la concesión de la obra y, a partir de ahí, ya podrán “hablar de plazos”.
Según los últimos datos del INE, a mayo de 2022, el número de establecimientos hoteleros abiertos en Vigo se elevó a los 68, frente a los 64 de abril y marzo, los 61 de febrero y los 53 de enero. Ante el aumento de la competencia, otros negocios vigueses han optado por modernizarse, como el antiguo Hotel América –ahora Maroa Hotel– que fue reformado el pasado año. Su director, Manuel Herranz, cree que las perspectivas son buenas este año, si bien los datos siguen sin ser mejores que los de la prepandemia.
Ante el embarco de nuevos adversarios, elude la crítica y apuesta por la urbe. “Todo lo que sea nuevo le da valor añadido a la ciudad”, señala, en sintonía con Iria Pérez, jefa de recepción del Exe Vigo. Ella incide en que “siempre es bueno que haya oferta en una ciudad que está en crecimiento”. “Hay que avanzar, no por ser un hotel pequeño quiere decir que te vaya mejor”, agrega.
Paralelamente, el presidente de la Asociación de Hoteles de Vigo (Ahosvi), Jaime Pereira, evidencia que la oferta turística actual “está bien dimensionada, tanto en calidad como en cantidad” y la competencia “hace que los antiguos tengan que agudizar su ingenio”. A su parecer, la solución reside en “actualizase”. Mejorar servicios y lugares para garantizar la comodidad de un público objetivo dinámico.
El “Bolette” atraca con 907 cruceristas a bordo
Proveniente de Southampton, a mediodía de ayer atracó en Vigo el crucero británico Bolette, nuevo buque del operador Fed. Olsen Cruises, en su segunda y última visita de este año a la urbe. Según indica la agencia Pérez y Cía., abordo del Bolette viajan 907 cruceristas y 657 tripulantes que se dirigen al Mediterráneo en un crucero de dos semanas con atraques en cuatro puertos italianos y dos andaluces. Informa Fco. Díaz Guerrero.