Los conductores que lo utilizan con frecuencia saben muy bien de su importancia. Se trata del atajo que permite llegar desde el inicio de Sanjurjo Badía hasta la Travesía de Vigo: la calle Coutadas, que se cerró al tráfico hace tres meses.

Desde mediados de abril se cerró al tráfico —la obra estaba previsto que durara un mes— y los conductores no pudieron desde entonces circular por el tramo bajo de este vial debido a la obra de reparación de un muro. No es la primera vez que hay problemas en este estrecho vial con una pared.

De esta forma, todos los conductores que entraban hasta ahora por Sanjurjo Badía y querían desviarse hacia Travesía de Vigo no podían hacerlo, ya que la calle Coutadas estaba cerrada. La única opción era la de continuar hasta el cruce con la calle Santander o llegar hasta Buenos Aires, un itinerario mucho más lento que provocaba que las ya habituales retenciones por Sanjurjo Badía fuera todavía peores.