Un aparatoso incendio registrado el sábado por la noche en la piscina municipal de Teis obligará a cerrar estas instalaciones sine die a la espera de que se evalúen y solventen los graves daños que se produjeron. El fuego, que causó una gran columna de humo visible desde distintos puntos de la ciudad y cuyas labores de extinción se prolongaron durante cuatro horas, se originó en el cuarto de contadores eléctricos cuando el centro deportivo ya estaba cerrado al público.
La intensa humareda se expandió por toda esa planta baja hasta las zonas en las que están la piscina, el gimnasio, los vestuarios y la parte administrativa, áreas que también se vieron severamente afectadas. El siniestro obligará a retirar el agua que había la piscina debido a la contaminación sufrida y a realizar una limpieza de carácter industrial. Los agentes del grupo de la Científica de la Policía Nacional se harán cargo, mientras, de la investigación sobre las causas del incendio.
Una visible humareda saliendo de estas instalaciones de la calle Coutadas alertaba a los vecinos. Las llamas también eran visibles. Eran aproximadamente las 23.10 horas del sábado. El centro ya estaba en esos momentos cerrado al público y fue una empleada de la limpieza que estaba allí trabajando quien avisó a su responsable tras percibir un fuerte olor a quemado. La aparatosidad del incendio fue tal que los bomberos desplazaron al punto tres vehículos y no fue hasta las 03.00 horas cuando por fin pudieron acabar las labores de extinción.
El núcleo del incendio se situó en un cuarto de contadores eléctricos localizado en la planta baja. Parte de la humareda se disipó por todo ese mismo nivel del edificio, desplazándose a la zona en la que están la piscina, el gimnasio, los vestuarios y la parte administrativa. Prácticamente toda la planta baja resultó gravemente dañada, aunque afortunadamente las llamas no alcanzaron los depósitos de cloro. Los bomberos explicaron que, desde el cuarto de contadores donde se originó el fuego, el humo fue expandiéndose por las bandejas de cables por las zonas de la sala de calderas y del depósito de agua.
Las labores de extinción se prolongaron tanto tiempo debido a la dificultad que tuvieron los efectivos para ventilar la zona, ya que las ventanas de la instalación carecen de apertura, por lo que tuvieron que utilizar ventiladores. Durante estas labores hubo que cortar temporalmente los suministros de agua y luz en la zona. Ayer por la mañana los bomberos regresaban a la piscina para revisar el lugar. El Concello no precisó cuánto tiempo prevén que duren las labores de reparación de los daños y limpieza ni cuánto tiempo estará cerrada la piscina.
Nuevo incendio en Beiramar
Y a última hora de la tarde la alerta saltaba en Beiramar, en la antigua nave de Frigoríficos Berbés, instalaciones hoy tapiadas que sufrieron dos voraces incendios en 2011 y 2013. Bomberos, Policía Local, Policía Nacional y Policía Portuaria acudieron al lugar tras el aviso de un incendio.
El humo alertó a los residentes de esa zona. En este caso, la extinción fue rápida. Pese a que el edificio se tapió, el portalón, según vecinos, se podía abrir con facilidad y es habitual ver a okupas acceder al recinto. Ardieron plásticos, basura, espumas y cartones que había en el interior. Los agentes comprobaron que no había ninguna persona dentro.
