La sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo, ha confirmado el año de prisión impuesto al dueño de una batea por robar 620 cuerdas en otra.

Los hechos ocurrieron entre las 00.00 horas del 2 de mayo y las 12.30 horas del 3 de mayo de 2018. "Con afán de obtener un beneficio patrimonial ilícito", dice el fallo, el sentenciado, F.C.C., se apropió de 500 cuerdas vacías y 120 atadas con mejillón de la batea "Primavera II" perteneciente al distrito de Vigo (polígono A, cuadrícula 20) radicada en Chapela, propiedad de S. P. P. En la sentencia se valora lo sustraído de la batea en 21.830 euros

El acusado alegó que se había vulnerado su derecho a la intimidad por la inspección de la Guardia Civil en la batea de su propiedad, "Abra IV", efectuada sin su presencia "máxime teniendo en cuenta que las bateas son bienes inmuebles, de titularidad privada e inscribibles en el Registro de la Propiedad", razonaba en su recurso

La resolución del recurso de apelación la sala ha rechazado la argumentación del acusado. "No puede admitirse que se haya vulnerado la intimidad del denunciante cuando los agentes de la Guardia Civil y el testigo se acercaron a la batea para observar las cuerdas allí depositadas, los nudos y sus chicotes o remates", comenta.

El agento lo negó, pero aun en el caso de que se subieran a la batea "tampoco se habría producido tal vulneración". Porque "la batea no está sujeta al régimen de propiedad privada, pues no es más que una concesión concesión administrativa regulada por el Decreto 406/1996 de 7 de noviembre, por el que se aprueba el Reglamento de viveros de cultivos marinos en las aguas de Galicia.