Vigo se ha llenado esta mañana con los colores de la Holi Run más esperada que se haya visto nunca. Tras dos años de parón por la pandemia, la carrera de colores más importante de España congregó en Samil a miles de personas. A la espera de un cifra oficial, el ayuntamiento apuntaba a superar los 5.000 participantes en esta séptima edición.
La carrera, de corte popular, se extiende a lo largo de cinco kilómetros por la playa, donde los corredores se empapan los polvos de colores que lanzan hasta cinco cañones de pintura. Tras la carrera llega la fiesta propiamente dicha, que cuenta con la participación de varios DJ dispuestos a amenizar la mañana de los improvisados corredores.
El evento fue presentado oficialmente en el Centro Comercial Travesía, donde se recogieron los dorsales y entradas. El alcalde, Abel Caballero, ha recordado que los beneficios obtenidos con la reserva de entradas irán destinados a la ONG Atendo
