El responsable de un céntrico bar de Vigo dio cuenta ayer a la Policía Local del hallazgo en su local de una pulsera de control telemático. La sospecha, a la espera de confirmarlo con el número de identificación del dispositivo, es que era la que le habían colocado al exboxeador Roberto Domínguez, que precisamente este viernes ingresó en prisión tras ser detenido por romper su pulsera de localización, que le impusieron por la orden de alejamiento que debe cumplir con respecto a su expareja. El bar donde apareció era frecuentado por el expúgil.