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Los costes e intereses del Colegio de Enfermería por los impagos al Consejo suman 4 millones

El presidente del colegio, Carlos Fernández, al ingresar en prisión en marzo de 2021. | // ALBA VILLAR

El trabajo de los agentes de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) durante días en la sede de calle Aragón –Vigo– del Colegio Oficial de Enfermería de Pontevedra (COEPO) que terminó con la detención de su presidente durante los últimos 36 años, su mujer y su hija resultó ser la crónica de un suceso anunciado. Primero, a tenor de las numerosas sentencias que lo auguraban y luego por las reacciones de los colegiados ante los hechos: “Nos pilló de sorpresa la denuncia, no los hechos. Nunca hubo transparencia ni publicidad en este Colegio; no se anunciaban las asambleas, no se informaba sobre las cuentas... A los enfermeros y enfermeras nos urge un Colegio que empiece de cero”, reconocían entonces los enfermeros.

El presidente, tras su detención hace un año. // FdV

Ha pasado un año desde que Carlos Fernández, su mujer Carmen Gayoso y su hija Estefanía ingresasen en prisión provisional por orden del magistrado del Juzgado de Instrucción 2 de Vigo que dirige la causa, secreta desde hacía un año antes, investigados por supuestos delitos de blanqueo de capitales, administración desleal y falsificación documental.

El perjuicio del Colegio de Enfermería por los impagos al Consejo asciende a 4 millones e.v.

La denuncia que propició los arrestos y motivó la apertura de la causa penal fijada el fraude en 11 millones, si bien el juzgado optó por designar tanto para el Colegio como para las empresas que actuaban de pantalla de cara al presunto blanqueo dos administradores judiciales que reorganizar las cuentas y determinar el auténtico perjuicio económico. Tras casi un año de investigación, estos profesionales están remitiendo sus últimos informes al juzgado instructor. El último data de finales del 2021, concretamente del mes de diciembre, y en él entran a valorar los sobrecostes a las cuentas del órgano colegial que le han supuesto los impagos al Colegio General de Enfermería.

Sin pagos desde 1993

Y es que todos los colegios autonómicos deben hacer frente a una aportación o canon, si bien el pontevedrés, siempre según este informe, dejó de abonarlo en 1993 es decir más de 28 años. Esto supuso que la deuda, en intereses y costas y retrocesiones, ascendiese a los 4 millones de euros, cifra que de haber abonado el COEPO las cuotas al Colegio General en su momento no existiría.

A lo largo de doce folios, los administradores judiciales –cuya designación acaba de ser recientemente ratificada por la Audiencia Provincial tras la apelación de los tres investigados– desgranan los impagos que el Colegio, y por lo tanto su presidente Carlos Fernández, dejó de realizar al Consejo.

Todo parte de 1997, cuando se dejó de pagar las aportaciones al Consejo después de que éste abriese un expediente disciplinario a su presidente y se interviniese contablemente al Colegio por la existencia de una deuda sin justificar de 1993 “que el COEPO se negaba a pagar”.

Más impagos

Posteriormente, y ante esta intervención contable, ratificada por el Supremo, en 2003 se paga la deuda anterior a 1998 no así la posterior.

Entre ese año y el 2010 no se pagan las aportaciones en base “ a la impugnación de las reuniones de las Asambleas Nacionales”. Entre 2011 y 2012 simplemente no se pagan, sin llegar a impugnarse nada. En 2013 tampoco se pagan al igual que los periodos de 2014 a 2016. Ya en 2017 el Colegio, que seguía sin pagar, alegaba que según sus estatutos la fijación de estas aportaciones “tenía que ser mediante acuerdo bilateral”. El Tribunal rechazó este argumento calificándolo “como un medio para eludir el pago de la deuda”. Las cuotas entre los periodos de 2018 y 2021 tampoco se pagaron.

Todas estas cuantías, recogen los administradores en su informe, se han fijado conforme a acuerdos firmes “habiendo sido confirmados en vía judicial”, por lo que el Colegio no podía eludir, como hizo, su pago.

Una "morosidad tajante"

¿Qué pasaría si el Colegio hubiese abonado su deuda? ¿Podría acogerse a retrocesiones? Explican ante esto los administradores judiciales que el Colegio “ha obligado con su actitud constante, injustificada y renuente a iniciar costosos y largos procedimientos de reclamación de aportaciones, que, en al menos dos casos, han concluidos con sentencias que declaran la morosidad colegial de forma tajante y concluyente”.

Atendiendo ahora a las cifras, desde que dejó de pagar hasta octubre de 2011 la deuda con el Consejo era de 3,042 millones de euros; esto generó unos intereses y costas, que junto a las retrocesiones, cuantifican el perjuicio en 2,3 millones. Entre octubre de 2011 a 2015 los importes impagos fueron de 1,7 millones, con unos intereses, costas y retrocesiones de 726.374 euros. Para finalizar, entre octubre de 2015 a septiembre de 2021, la deuda ascendía a 2,5 millones con unas cotas, intereses y retrocesiones de 1,052 millones. En total, el perjuicio económico por no cumplir con el Consejo General de la Enfermería, según los administraciones es de 4,1 millones. La cifra que se les adeudaba, a mayores, era de 7,3 millones de euros.

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