Un viaje en el tiempo tres años atrás. El puerto de Vigo vivió ayer el primer desembarco masivo de cruceristas de la nueva temporada con la presencia simultánea de dos megacruceros, Ventura y Sky Princess, que acercaron a la ciudad a un total de 7.027 personas. Esta invasión se reparte entre los 4.685 pasajeros, y tripulantes las 2.342 restantes según datos facilitados por las consignatarias Pérez y Cía. y Antares Forwarding respectivamente.

Desde septiembre de 2019 no recibía el puerto vigués una expedición tan numerosa. El Ventura que arribó primero, llegó en ruta de Southampton a Lisboa en crucero de 12 noches en los que también tocó en Cartagena, Gibraltar, Málaga y Cádiz.

Por su parte, el Sky Princess hacía su debut en la ciudad a la que llegaba en ruta de Madeira a Southampton en crucero también de 12 noches, en el que antes de arribar a Vigo había pasado por Lisboa, Las Palmas, Tenerife y Arrecife.

Doble escala internacional para recuperar el pulso

Además de hacerse notar en las calles más céntricas de la ciudad, el pasaje pudo disfrutar de excursiones organizadas a Santiago, Baiona, Cambados y Pontevedra.

La crisis provocada por la pandemia mantiene los precios contenidos, al menos en el mercado británico, ya que las plazas más asequibles de ambos cruceros fueron ofertadas en distintos portales del sector por menos de 900 euros. Ventura y Sky Princess, que zarparon a primeras horas de la tarde, volverán a coincidir en la estación marítima el próximo día 21.

Lleno total en el Náutico

Durante toda la mañana el trasiego fue continuo entre viandantes y autobuses que llevaban a los centenares de pasajeros a otras localidades, aunque los guías turísticos también estuvieron presentes en la Praza da Constitución o el Monte do Castro para enseñar la otra cara de la ciudad más allá de su fachada marítima.

Decenas de personas abarrotaban la planta baja del Centro Comercial A Laxe que vivió una de sus mejores mañanas laborables en meses. Los locales de pastelería y restauración fueron asaltados por los viajeros que buscaban tanto los dulces típicos como caprichos que se salieran de la comida ofrecida abordo.

Los ingleses Paul y Carla durante su segunda visita a Vigo Víctor P. Currás

Entre ellos estaban Sandie y Arnie, dos turistas estadounidenses que pese a conocer otras ciudades españolas, se mostraban gratamente sorprendidos en su primera visita a Galicia. Naturales de San Francisco, la comparación del Golden Gate con el puente de Rande era inevitable: “Se parece un poco” reconoce Sandie desde la comodidad de As Avenidas.

Desde el sur de Inglaterra llegaban Paul y Carla, viejos conocidos de la ciudad, reconocen que “luce más bonita” y son capaces de distinguir algunos cambios desde su primera visita hace diez años. Ambos lamentan el cambio de tiempo repentino y las nubes les empujaron a quedarse cerca del barco.

Peter y Kim, tripulantes filipinos del Sky Princess durante su escala en Vigo Víctor P. Currás

En la misma línea apuntan Peter y Kim, dos jóvenes filipinos que forman parte de la tripulación del Sky Princess. Junto con otros veinteañeros aprovecharon la escala para “explorar la ciudad” en sus pocas horas de descanso.

El perfil del turista era mayoritariamente británico y de avanzada edad, por lo que las mascarillas siguieron muy presentes aunque ya no fueran obligatorias.

Ventura y Sky Princess llenan Vigo con la primera escala doble en tres años Ricardo Grobas

Estas compras, paseos y charlas en las terrazas cambiaron el paso después del mediodía ya que se abrió el turno de comida a la las trece horas; por lo que buena parte de los cruceristas decidieron regresar al buque ante el mal tiempo en la calle.

A las cuatro y media de la tarde, el Sky Princess emprendía el rumbo hacia Southampton mientras que el Ventura lo hacía media hora después hacia Lisboa. Mientras la borrasca hacía su entrada en la ría para aguar el inicio de la Semana Santa, la ciudad despedía la primera de las doce escalas dobles que espera para este año. La primera escala triple deberá esperar, al menos, hasta el 16 de septiembre.