Vigo arranca el 2022 con un amplio consenso en una de las actualizaciones más importantes de sus ordenanzas. El segundo pleno del año aprobaba ayer con 24 votos a favor y una abstención la nueva regulación de la circulación de vehículos de movilidad personal en las vías urbanas de la ciudad.

La concejala de Seguridad, Elena Espinosa, incidía en que esta iniciativa buscaba aclarar aquellos aspectos en los que la norma estatal –aprobada en septiembre– no llegaba. Además de la obligatoriedad del casco y el chaleco reflectante o el veto para su circulación en zonas peatonales, refuerza la apuesta por la movilidad sostenible.

El concejal popular Jesús Marco daba la enhorabuena al equipo de gobierno por el trabajo realizado y añadía como única propuesta la reducción de la edad mínima de conducción de los quince actuales a los catorce años.

Rubén Pérez, de Marea de Vigo, apuntaba a los problemas que ya generan en otras ciudades al “dejarse tirados” en la propia calle y apostaba por la obligatoriedad de los chalecos reflectantes ante el escaso tiempo de reacción que dejan a los conductores estos vehículos.

Jaime Aneiros, concejal de Facenda, durante el pleno municipal Alba Villar

Únicamente el BNG no votó a favor de la propuesta –después de solicitar un voto particular– al mostrarse contrario a “blindar el monopolio del coche en la vía pública”. El concejal nacionalista, Xabier Pérez Igrexas, se refería de esta forma a la prohibición de circulación con estos vehículos en cinco calles.

También se aprobó la actualización del impuesto de la plusvalía declarado nulo por el Tribunal Constitucional en octubre. El concejal de Facenda, Jaime Aneiros, destacaba la rebaja aprobada, así como la exención en aquellos casos donde no se obtenga beneficio.

Parque público de vivienda

Otro de los puntos de mayor actualidad fue la moción que solicitaba a la Xunta la transferencia de la gestión del Plan Estatal de Vivienda, propuesta por el grupo socialista y apoyada por BNG y Marea.

El representante de este grupo celebró especialmente la contemplación de “un parque de vivienda pública protegida de titularidad municipal”, algo que permitiría atender las 5.500 solicitudes recibidas en esta materia por el Concello.

Esta medida llega después de que el Concello denunciase que el 63% de los fondos recibidos por la Xunta desde el gobierno estatal no eran empleados, rechazando además el 80% de las peticiones.

Esta cuestión se abordaría al analizar las cifras del último censo publicado por el INE, en los que la ciudad perdió casi 3.000 habitantes en el primer año de la pandemia. Mientras que el popular Alfonso Marnotes apuntaba a una elevada presión fiscal, tanto Rubén Pérez como Jaime Aneiros indicaban en un cambio del modelo demográfico a nivel estatal con un traslado a casas en áreas rurales o municipios del área metropolitana.

Grupos de la oposición en el pleno municipal de hoy Alba Villar

Reapertura de Vigosónico

Mientras varios músicos se concentraban en la Praza do Rei, la reapertura de Vigosónico volvía con fuerza al pleno. El único local de ensayo de la ciudad permanece cerrado desde el inicio de la pandemia, obligando a los grupos a pagar unos 10 euros por cada hora de alquiler en salas privadas.

La concejala Oriana Méndez criticaba la gestión señalando la falta de explicaciones y plazos por parte del Ayuntamiento, lo que llevó a inutilizar parte de los instrumentos que quedaron durante meses en el bajo por los efectos de la humedad. De esta forma y una vez recuperadas el grueso de las actividades municipales, todos los grupos de la oposición exigían su vuelta, añadiendo además algún servicio de autobús que permitiera una mejor conexión de la parroquia con el resto de la ciudad.

Carlos López Font alegaba las dificultades técnicas y sanitarias de este recinto constituido por una planta baja y un semisótano. El portavoz municipal destacaba la nula ventilación de las salas y su uso por parte de los jóvenes, el último grupo en acceder a la vacunación. De esta forma, desde el gobierno local emplazaban a la reunión que se celebrará el próximo día 4 entre la concejala y los grupos afectados; en los que recibirían una propuesta que “les iba sorprender”.

Tanto la congelación de tarifas y bonificación en la autopista al Val Miñor como la retirada de la candidatura de las Illas Atlánticas como Patrimonio de la Humanidad por parte de la Xunta en favor de la de las Islas Cíes fueron debatidas por los cuatro grupos, siendo aprobadas ambas mociones con los votos del gobierno local.

Dos mociones exigen el refuerzo de la atención primaria

La única propuesta de la oposición que logró salir adelante fue la presentada por Xabier P. Igrexas para el “fortalecimiento de la atención primaria” en el área sanitaria. El concejal del BNG la calificó de “zona cero da desfeita” y criticó las restricciones vigentes este mes.

El PSdeG presentó una instando a la Xunta a garantizar los recursos humanos necesarios para este área. Carlos López Font aseguró que Vigo es el “campo experimental” de la Xunta en la materia y recordó la dimisión de los jefes de servicio en 2019.

Ambas mociones contaron con el voto a favor de Marea y las críticas del PP local, calificándolas de “demagogia”.