Después de casi 60 días, la Navidad en Vigo llega a su fin. Los once millones de luces LEDs se apagarán durante unos meses este domingo después de alargar una semana más su vida ante la alta demanda de visitas.

Desde las 19:30 horas de la tarde la gran fiesta invernal toca a su fin después de que por ella pasaran más de 5 millones de visitantes según confirmó hoy el alcalde. Abel Caballero volverá a presidir este apagado del que ya se sabe el protocolo a seguir.

¿Dónde seguirlo?

El acto central volverá a ser, una vez más, en el árbol de Policarpo Sanz. El alcalde volverá a apretar el botón encargado de la desconexión en la zona "cero", aunque ante la situación sanitaria actual ha incidido en una de las claves del mismo.

El hecho de que las luces se apaguen en la vez en toda la ciudad permitirá seguirlo desde cualquiera de las 350 calles iluminadas actualmente.

Al mismo tiempo e igual que en el gran encendido del 20 de noviembre, podrá seguirse a través de la web del Concello y Localia; por lo que incluso aquellas personas confinadas o de fuera de Vigo podrán presenciar este apagado.

¿Cuántas personas podrán verlo?

La normativa sanitaria actual permite un máximo de 500 sillas en un espacio acotado delante del árbol. El Concello agotará ese cupo y señala que el resto de la calle tendrá circulación libre, por lo que solamente será necesario el uso de mascarilla y distancia de seguridad.

¿Quién podrá acceder?

Estas plazas se cubrirán, una vez más, por riguroso orden de llegada. Se establecerá un corte en la calle en las horas previas para evitar que se tomen los asientos antes de tiempo.

Sin embargo, el alcalde garantiza que entre 50 y 70 personas del ámbito social de la ciudad puedan tener un asiento reservado. Serán miembros de asociaciones de vecinos, culturales, deportivas o de mayores.

¿Qué nos espera en el apagado?

En noviembre fue el paso de la Estación Espacial Internacional el "as en la manga" guardado por Caballero para sorprender a los miles de personas que siguieron este acontecimiento de relevancia mundial.

Sin embargo, la despedida será más modesta y seguirá la línea del año pasado; cuando el empuje de la tercera ola ya limitaba los encuentros sociales.

No están previstas actuaciones musicales y será un acto más "emotivo".