Fue el hallazgo de la tarjeta de crédito de Benito Torreiro Sío, un profesor jubilado de 69 años, en el coche que conducía David M.C.– de 21 años y natural de Monforte– tras ser interceptado en un control rutinario de la Guardia Civil en la AP-53 (Silleda) lo que permitió vincular al joven con el crimen del docente. En el maletero se encontraron múltiples pertenencias que habían sido adquiridas por el propio detenido con esa misma tarjeta bancaria, siéndole imputado inicialmente un delito de suplantación de identidad.
Suplantación de identidad
La hipótesis del robo planeó desde entonces como posible móvil del suceso, pero podría no ser así. Tanto que los agentes investigarán si fue el propio Torreiro quien le dio la tarjeta al ahora investigado para realizar múltiples compras. Es decir, comprobarán si los pagos hechos desde la cuenta del fallecido fueron autorizados por él.
Y es que según pudo saber este periódico, el joven pasó la tarde del crimen –una semana antes del hallazgo del cadáver– de compras en El Corte Inglés. Si estas fueron consentidas o no es lo que busca aclarar la investigación judicial, para lo que también se tomará declaración al vendedor de un turismo que fue adquirido por el joven detenido.
Relación entre ambos
Esta realidad echaría por tierra la hipótesis del robo, que todavía sigue sobre la mesa, y pondría en primera línea un posible desencuentro entre ambos. El propio David M.C. reconoció ante la Guardia Civil tras ser detenido –única vez que habló durante las diligencias– que conocía a la víctima y que había estado en su casa; en el mismo coche se localizaron las llaves del piso de Areal, 136 en el que vivía y fue asesinado Benito Torreiro.
Desconocido para su círculo
Se desconoce todavía el alcance de la relación que mantenían ambos varones. Fuentes próximas al caso vaticinan que el joven podría ofrecerle su compañía a cambio de una compensación económica. Lo que sí es verídico es que el círculo más próximo al profesor vigués desconocía esta supuesta amistad.
Volcado de ordenadores y redes sociales
Para arrojar luz a este extremo, se procederá al volcado de los ordenadores personales así como a la revisión de las cuentas en redes sociales y determinar si ambos se conocieron a través de Internet. El joven investigado era muy activo en sus redes, contando con varias cuentas y cientos de seguidores en ellas.
Revisión de las cámaras de la AP-53
También fundamental para la investigación será reconstruir los pasos de David M.C. el 4 de enero, fecha en la que la Policía halló el cuerpo sin vida de Torreiro en su domicilio en medio de un gran charco de sangre.
Para ello se revisarán las cámaras de vigilancia de la AP-53, donde a la altura del peaje de Silleda fue interceptado por la Guardia Civil el joven. A los agentes les llamó la atención la actitud “muy nerviosa” del ahora investigado, que procedieron a su identificación, al igual que sus acompañantes, varios menores de edad y otro que sí superaba los 18 años. Todos ellos también serán citados a declarar ante el Juzgado de Instrucción 4 de Vigo, que se hizo cargo de la investigación por estar de guardia en el momento en el que se cometió el crimen.
