Efectivos del parque de Bomberos de Vigo acudieron ayer hasta en cinco ocasiones a domicilio para la apertura de puertas y ascensores. Estos servicios humanitarios se debían, en su mayoría a despistes; por un lado una pareja se quedó atrapada en el balcón, una señora no escuchó el tiembre y sus familiares se preocuparon, otro fue por una inundación y a otros dos hubo que sacarlos de un ascensor.