En este puente de la Constitución que acaba de finalizar pasó lo que nadie quería que sucediera. Las llamadas a la prudencia por parte de las autoridades sanitarias parece que no hicieron efecto en parte de la población. Prueba de ello son las preocupantes imágenes que se vieron en varias salas de conciertos y locales de ocio nocturno de Vigo durante el fin de semana, donde las medidas de prevención brillaron por su ausencia.

Especialmente en cuanto al uso de la mascarilla y la exigencia del certificado de vacunación o prueba negativa del COVID para poder entrar en el local. Una situación que indigna profundamente a los profesionales sanitarios, que vienen denunciando en los últimos días que parte de la ciudadanía se comporta como si la pandemia ya hubiese terminado.

Precisamente, las Urgencias del hospital Álvaro Cunqueiro atendieron durante este puente, especialmente el fin de semana, a varios jóvenes con intoxicaciones etílicas. Los propios acompañantes confesaban a los sanitarios que les atendían que en el lugar donde habían pasado la noche no se estaba tomando medida preventiva alguna y que no les pidieron el certificado COVID. Es más, tal y como informó ayer FARO, algunos after hours de la ciudad han vuelto a abrir en un horario que en teoría no tienen permitido, más allá de las cinco de la madrugada.