Sin nuevas respuestas desde el Gobierno ante la demanda del AVE por Cerdedo. Después de las reticencias mostradas por Adif y Transportes a la línea y la réplica de Abel Caballero calificando el proyecto de “irrenunciable”, el trazado pasó de largo por el congreso de los socialistas gallegos.

Pedro Sánchez acudía esta mañana a Santiago para clausurar el cónclave que coronaba a Valentín Gómez Formoso como nuevo secretario xeral del PSdeG. A su lado estuvo el alcalde de Vigo en una primera fila copada de viejas glorias del partido, como el ex-ministro José Blanco.

La única referencia a esta infraestructura fue reafirmando al actual presidente de la Diputación de A Coruña sobre la llegada de estos trenes a partir del 21 de diciembre a la comunidad “por fin después de unos cuantos años de retraso”.

El secretario general del partido evitaba así recoger el guante del presidente de la FEMP, de quien destacó los acuerdos y el reconocimiento institucional logrados con los ayuntamientos en el último año. Solamente a la salida del congreso, Caballero aseguraría que sabe “lo que opinan la ministra y la secretaria de Estado” y que ello garantiza el apoyo al proyecto desde Madrid y volvía a requerir "la voluntad política de todo el mundo"

El presidente desglosó las grandes cifras de los Presupuestos Generales del Estado para la comunidad autónoma, incidiendo en los 8.000 millones de euros que serán transferidos a la Xunta o los 1.070 destinados a inversiones directas.

Sánchez Castejón se congratulaba de que “los recursos en estos últimos cuatro años eran un 27% mayores que en los últimos cuatro de Mariano Rajoy”, período en el cual las obras de Alta Velocidad concentraron el grueso de la financiación.

No repitió el discurso utilizado en Murcia el domingo, cuando en la proclamación de José Vélez como nuevo líder de los socialistas en la Región garantizó la llegada del AVE en el segundo semestre del 2022.

Ourense apuesta por el trazado de Mondariz

Quien sí se ha pronunciado sobre el trazado de Cerdedo ha sido el alcalde de Ourense a través de su perfil personal en Twitter.

Gonzalo Pérez Jácome criticaba esta opción señalando que “si la distancia más corta entre 2 puntos es la línea recta, no tiene mucho sentido pedir un AVE Vigo-Ourense por Cercedo (sic) aseveraba confundiendo el nombre del municipio pontevedrés, fusionado en 2016 con Cotobade.

Para el líder de Democracia Ourensana dicha variante entre Barro y O Carballiño “parece más un semicírculo” dado su itinerario. 

El 5 de noviembre el pleno del concello aprobó dos mociones de PSOE y Ciudadanos relativas a la conexión ferroviaria entre Vigo y Ourense en las que apostaban por el nuevo trazado que recorrería el valle del Tea y Mondariz.

Incluso UGT, principal impulsor de la variante en estudio actualmente; oficializaba su cambio de postura en verano al optar por el nuevo trazado, tasado en 1.900 millones y 25 minutos de distancia entre ambas ciudades.