El “Nadalbus” ya recorre las calles de Vigo con el que se pretende que más público pueda acceder a un pequeño tour por la ciudad para ver las luces desde un cómodo asiento. Abel Caballero, –encargado de inaugurar el servicio– ya pudo comprobar de primera mano, desde su planta superior descubierta “las increíbles vistas que ofrece de la ciudad”. Después del “tren y el barco do Nadal”, la oferta navideña se ha ampliado este fin de semana con la apertura de la muestra de dinosaurios, el circo y el parque hinchable. Ahora se suma el bus, proporcionado por la concesionaria Vitrasa, con capacidad para 78 personas y cuyo recorrido comenzará y finalizará en García Barbón a la altura del muñeco de nieve. Los que decidan tomar esta alternativa de transporte para admirar la decoración navideña pasarán por calles tan emblemáticas como Colón, Plaza de España o Camelias. El precio ordinario de la entrada será de 7 euros y los menores de 3 años no pagarán asiento. Se realizarán viajes todos los días en horario de tarde. Estará activo hasta el 9 de enero.
La ciudad vive desde ayer sus días más agitados con cientos de turistas que atestan cada rincón. Los establecimientos comerciales –que abrieron sus puertas igualmente, a pesar de ser domingo– rebosaban de clientes que no quisieron perder la oportunidad de hacer sus compras navideñas aprovechando el inicio del puente de la Constitución. El nivel de ocupación hotelera para este macropuente rozó el lleno casi total. “La verdad es que nos hacía falta un revulsivo así, para compensar las pérdidas del año pasado”, señalan los hosteleros de Vigo. “Hay muchísima gente, es normal, es el primer puente después de las luces y la gente aprovechó para venir, pero parece que vino toda a la vez”, comentaba una de las vendedoras del mercado de la Alameda. A partir de este fin de semana queda inaugurado al completo todo el abanico de propuestas navideñas para que tanto los vigueses como los turistas puedan apreciar el ambiente que se respira en la villa olívica desde todas las aristas posibles.
Atascos y caos de tráfico
Tanta gente hubo el sábado y también durante el domingo en Vigo, que los parking se saturaron en poco tiempo, lo que provocó una suerte de atascos en las pocas arterias que quedan de acceso y salida de la ciudad. Y es que la avalancha de gente que se acercó este fin de semana a la se topó no solo con largas caravanas sino también con las obras que están en este momento realizándose en varios puntos de Vigo. “Hemos recibido múltiples llamadas de usuarios quejándose por los atascos en los que estaban inmersos y manifestaron su imposibilidad de salir de la ciudad”, advierten desde la Policía Local. Esta situación se vio intensificada en el día de ayer por el partido que el Celta que se jugaba en Balaídos. El acceso por los túneles de Beiramar estaba colapsado y la gente trataba de encontrar una alternativa de salida que era imposible “debido a la congestión del tráfico”.
