La platea del Teatro Afundación a oscuras no advierte lo que se viene. Tal vez, Teresa Alonso, de 96 años –que el sábado estará sentada entre esas butacas viendo cómo su nieta acabó cumpliendo su sueño encima de los escenarios– no sepa lo que va a ver a continuación. Isabel López (36) alias Isa Belui, sentirá la emoción de estrenar temporada en el templo del teatro en Vigo, en su casa. Quizá, ni siquiera ella sabía que cuando se marchó de las Traviesas en 2008 a Zaragoza para trabajar con el Circo del Sol, acabaría estudiando en una escuela de circo en Madrid y siendo “clown”. Ella, que iba para bailarina.

Un momento del espectáculo CLOWNS en el Teatro Afundación. | // PABLO HERNÁNDEZ

Probablemente los cuatro niños y niñas que van el domingo con sus padrinos –un estupendo regalo que combina el propio presente y compartir una experiencia– piensan que van a ver a unos payasos que les van a hacer reír y que al final les obsequian con un globo en forma de salamandra. Nada de eso. Borren los estereotipos. Cuenta nueva para un espectáculo de sensaciones. “Tienen que venir porque es distinto, es bonito y estimulante. Entra por los cinco sentidos que tenemos. Porque es para todos. Y qué mejor después de toda esta época tan difícil que hemos tenido que reírnos y emocionarnos”, señala la viguesa Isabel López, una de las “clown” del espectáculo.

Los 80 minutos que dura este viaje interior a esa parte de la infancia más poética y más pura; en la que un gesto despierta absolutamente todos los sentidos, comienza con un maestro de ceremonias –Gensi, de los carablancas– cuya interpretación trasciende a la de un payaso tradicional. Hay tablas y de las fuertes. Un narrador que conduce el cotarro que allí se organiza. “Los clowns son personajes que encarnan un rol: el tonto, el listo, el gamberro, la artista… y yo soy el que pone orden”, apunta Fulgenci Mestres, alias Gensi.

"Desde los 3 hasta los 103 años podemos disfrutar al máximo de esta propuesta diferente, divertida y sensacional”

La escenografía y el decorado trasladan al espectador a un Moulin Rouge con tintes barrocos, presentes en las vestimentas. Luces de colores, la interpretación de instrumentos artesanales con los que repasan “melodías de Mozarth o los Beatles” son algunos de los muchos momentos para dejarse embelesar.

Ni un minuto de aburrimiento

La elección de un solo momento se hace difícil. Tienen para escoger ente el humor gestual y onomatopéyico que recuerda a las cápsulas televisivas de Pepe Viyuela, el espectáculo circense de la gimnasta dibujando figuras en el aire, el “clown” bonachón y torpe que hace dos saltos mortales en la cuerda de equilibrio o los respiros bucólicos a los que Isa Belui transporta con sus maneras de Alicia. Sí, la del País de las Maravillas.

Desde Alemania, Ucrania, Italia y España llegan estos cinco maestros y maestras del humor que levanta las emociones. Cinco maneras de contarlo y cinco maneras de vivirlo. “Todos fuimos niños. Por lo tanto, desde los 3 hasta los 103 años podemos disfrutar al máximo de esta propuesta diferente, divertida y sensacional”, destaca Fulgenci. Si quiere descubrir el mundo de los funambulistas al más alto nivel y viajar a través de la carcajada, tiene una cita desde hoy hasta el domingo con funciones, jueves y viernes, 18.45 horas, sábado, 16.30 y 19.30 horas y domingo, 12.00 y 16.30 horas. Las entradas pueden adquirirse en www.ataquilla.com. Las medidas de seguridad permiten un aforo del 50%. Por cada representación serán 500 las plazas que estarán disponibles.