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Vigilar el COVID, la gripe y el virus sincitial a la vez

Una sanitaria tomando una muestra para una PCR. MARTA G. BREA

Cuando una persona se somete a una PCR en el Servicio Galego de Saúde (Sergas) en Vigo para saber si está o no contagiada por el SARS-CoV-2, el Servicio de Microbiología del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo (Chuvi) también analiza si tiene gripe o virus respiratorio sincitial. Mantienen así una vigilancia sistemática sobre la presencia de los virus respiratorios más comunes.

Este triple examen cuesta lo mismo y ofrece más información útil para la salud pública. El jefe de Microbología del Chuvi, el doctor Benito Regueiro, explica que se trata de una técnica comercial que permite detectar en la misma PCR los tres virus. Se utiliza con todas las que se realizan, ya sea en los hospitales o a través del pooling –el laboratorio de análisis de muestras agrupadas con el que se criba al personal sanitario y las residencias o al que van las muestras de saliva que se depositan en farmacias, entre otras–.

Al usuario, a través de un SMS, solo se le comunica si es positivo o negativo en COVID-19, pero la otra información es muy útil para los profesionales. Por ejemplo, para el manejo precoz de cuadros en algunos pacientes.

Y para el control de la situación en general. La gripe, con una campaña en blanco, aún no ha aparecido, pero se espera que esta temporada si lo haga con la relajación de las medidas de prevención. Eso fue lo que creen que pasó con el virus respiratorio sincitial, que apareció en verano, fuera de su estación, generando un pico de bronquiolitis en niños y algunos casos en adultos.

El doctor Regueiro teme que en los próximos meses pueda surgir una “ola combinada”: que los cuadros gripales coincidan con un repunte de coronavirus y se produzca un aumento de la demanda analítica en el complejo.

Evolución de la incidencia

La incidencia de COVID-19 en el área sanitaria de Vigo sigue descendiendo, aunque a un ritmo ya más lento. Se puede observar en un parámetro conocido como la razón de tasas que se obtiene dividiendo la incidencia a 14 días entre la de hace una semana. Por debajo de 1, la curva decrece y, cuanto más baja sea la cifra, lo hace a más velocidad. El día que la pandemia se contraía a más velocidad fue el 7 de septiembre –con 0,54–. Desde entonces ha escalado hasta 0,7, la mayor cifra desde hace casi un mes.

Aún así, sigue bajando y está ya en 69 nuevos diagnósticos por cien mil habitantes en dos semanas. Los ingresados bajan hasta los 18, la menor presión desde el 15 de julio.

En cuanto a la vacunación, además de la posibilidad de solicitar una autocita para el sábado en el Ifevi, el Sergas también ha habilitado 2.000 huecos en el Cunqueiro para hoy y otros tantos para el domingo. Sin embargo, en Beade también se pinchará ese día a todo el que acuda sin cita, hasta las 15 horas.

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