El Juzgado de lo Social número 4 de Vigo acaba de declarar nulo el despido, el pasado mes de diciembre, del director de comunicación del Colegio Oficial de Enfermería de Pontevedra, Joaquín Llorca. Se trata de una de las personas que trabajó en la recolección de documentación y redacción de la denuncia que el secretario Faustino Portela presentó ante la Unidad de Delicuencia Económica y Fiscal de la Policía Nacional y que desembocó en la detención, en marzo, del expresidente de la entidad, Carlos Fernández, su mujer y su hija por presuntos delitos de blanqueo de capitales, falsedad documental y administración desleal. En el fallo, la magistrada considera acreditada la existencia "de un entramado empresarial" que se dedica "a diferentes aspectos de la actividad del colegio, de tal forma que este se queda vacío de contenido".

El responsable de comunicación desde mayo de 2016 percibía sus retribuciones a través de Gestión Jurídica Gallega S.L., una de las tres empresas de este entramado y que tiene por objeto la consultoría fiscal, contable y laboral. Galaprint S.L., dedicada a la impresión de textos, es la titular de los inmuebles de las sedes del colegio en Vigo y Pontevedra, por las que este abonó 245.487 euros en los últimos cuatro años. Lo completa el Instituto Gallego de Formación Sanitaria y Promoción Social S.L.. "Aunque existen administradores formales de las mismas, en realidad se trata de testaferros, pues la gestión efectiva queda en manos de la familia del presidente del colegio y sustituyen al mismo en sus funciones", recoge la sentencia y detalla: "Una posee la propiedad de los inmuebles, otra le provee de defensa jurídica y otra proporciona la formación a los colegiados".

Con respecto al director de comunicación, el fallo indica que tanto los testimonios como las pruebas aportadas y las diligencias policiales iniciadas por la UDEF "no dejan lugar a duda" de que prestaba servicio para el Colegio de Enfermería pese a cobrar de otra empresa. Trabajaba en la sede del colegio, en donde tenía su despacho y ordenador. Seis meses antes de despedirlo, Inspección de Trabajo visita el colegio y la Tesorería General de la Seguridad Social le da de alta de oficio en el colegio y en octubre el comunicador presenta acto de conciliación. Desde ese momento, la sentencia destaca que el expresidente muestra su intención de prescindir de él, por lo que se escucha en los pinchazos telefónicos. "Muestra su descontento afirmando que el demandante "ha jugado cerdo" y que "no lo quiere aquí ni en la sombra", señala el texto y añade: "Su hija Estefanía pone en conocimiento de sus padres que deberían tener a otro periodista en cartera y que ella "gestión Gallega" puede pagarle otro".

La juez declara el despido nulo, por lo que el colegio tendrá que readmitirlo " de forma inmediata" con las condiciones que tenía antes de ser despedido. También deberá abonarle los salarios que dejó de percibir. Contra este fallo cabe recurso de suplicación ante la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia.

La Junta de Gobierno del Colegio Oficial de Enfermería ha convocado esta tarde una reunión extraordinaria para abordar este asunto.

Llorca destaca que "todos los trabajadores de las empresas relacionadas con el entramado de Fernández y su familia han emprendido acciones legales en pro del reconocimiento de su relación laboral con el Colegio de Enfermería y no con estas".