Vuelve a Vigo el festival de O Marisquiño después del paréntesis del año 2020. El evento, que estrena su vigésima edición este 2021, atrae a un público internacional y de lo más variado: niños, jóvenes, adultos e incluso mayores, entre los que se encuentran los más aficionados y los profesionales. Los vigueses llevan esperando este festival dos años y, por fin, vuelve a conquistar As Avenidas. De hecho, tanto las reservas hoteleras como las previsiones de restaurantes y comercios de la ciudad, rebasan el completo, disfrutando del tan esperado impulso.
O Marisquiño vuelve con las ganas y la ilusión de siempre, pero también lo hace con novedades impuestas por la situación sanitaria actual. Así, el primer cambio será la reducción de público. Por primera vez en los veinte años de historia de este evento, se restringirá la entrada a las competiciones mediante una previa venta de entradas. Eso sí, entradas gratuitas, que se agotaron cuando todavía faltaba una semana para la cita.
En la misma línea, habrá tres espacios burbuja (sí, como los grupos) que estarán delimitados con una valla doble, especialmente para que actúe como filtro de acceso e impida la visión desde el exterior. El objetivo no es privar del espectáculo a todo el que esté interesado, sino evitar al máximo las aglomeraciones. El público acreditado para entrar no podrá ponerse en pie ni comer ni beber (esto estará permitido en las áreas especificadas para ello). De la misma forma, está prohibido fumar en todo el recinto.
Algo importante es el llamamiento de la organización del festival, que pide que nadie asista al recinto si no se ha conseguido entrada. De hecho, todos los espacios estarán precintados con un doble cierre opaco que evitará la visión desde fuera. El objetivo, de nuevo, evitar un exceso de gente. Cabe destacar aquí que todos los tiques son intransferibles, numerados y personalizados. El público elige qué modalidad quiere ver, en qué horario y qué día, ya que sólo se permite acceder a una disciplina por entrada.
Los recintos
En este sentido, las pruebas del World Cup Skateboarding se celebrarán en el Muelle de Transatlánticos; el Queimada Contest de BMX tendrá lugar en la explanada del Náutico; y el Basket 3x3 y el Break Dance tendrán como escenario la Plaza de la Estrella. Los aforos permitidos para cada uno de los espacios son: 600 personas en el Skate del Muelle de Transatlánticos, 150 en el BMX del Náutico, 170 en break dance y 100 en basquet 3x3.
Por otra parte, la única disciplina que no contará con público será el descenso, el MTB DownTown, que se celebrará en las calles del casco viejo y que estrenará recorrido. Sin embargo, todos aquellos que estén interesados en esta prueba podrán verla vía en directo streaming a través de las redes sociales de O Marisquiño (YouTube, Facebook y Twitch) y en la página web de FARO. De la misma forma, desde el canal TVG2 se retransmitirán en directo las finales del domingo 8 por la tarde y resúmenes de la jornada del sábado. En la misma línea, las redes oficiales del festival retransmitirán en vivo una programación especial de cinco horas del sábado y del domingo. También, desde farodevigo.es se retransmitirán las pruebas estrella y, desde TVG, se emitirán diversos reportajes sobre el evento.
Éxito hostelero
En otro orden de cosas, los conciertos míticos, el mercado repleto de productos estrella para los más aficionados y los foodtrucks con un montón de opciones para pasar el día entre actividades, no podrán abrir sus puertas este año. En cambio, los establecimientos de Vigo están notando cómo sus reservas crecen, y mantienen una previsión optimista para el fin de semana. “Estamos rozando el lleno, y al final lo importante es que existe O Marisquiño, que se va a celebrar este año”, explica César Sánchez-Ballesteros, presidente de la Federación Provincial de Hostelería (Feprohos) y responsable del Hotel Bahía. “O Marisquiño es popular, gratuito, para todas las edades y con un perfil muy atractivo que nos permite captar más turistas.” Con él coincide Roberto Giráldez, presidente de Vigo Comercio, que asegura que “la previsión es buena y la reserva hotelera es buena, y eso es gente que viene y consume en la ciudad, tanto en el comercio como en la hostelería”.
Roberto Giráldez “La reserva hotelera es buena, y al final es gente que viene y consume en Vigo”
En cuanto al perfil de dichos visitantes, el efecto de las restricciones se ha hecho notar. Si en anteriores ediciones los turistas extranjeros y nacionales tenían un papel importante en las calles de Vigo, este año se ha reducido el rango. Así, llegarán, sobre todo, asistentes desde el norte de Portugal, de todas partes de la comunidad gallega y, en menor medida, turistas nacionales. Eso sí, predominarán los jóvenes y las familias con hijos aficionados. “Esperamos más gente de la zona en esta ocasión, pero también estamos viendo a mucho turista nacional que entra por la puerta, aunque no tenga la reserva hecha”, detalla Juanjo Figueroa, presidente de Casco Vello Vigo Hostelería e Comercio.
De todas maneras, lo que sí está claro es que el programa de O Marisquiño conquistará a todo el que pueda acercarse. El horario, que será de 10:00 a 22:00, permitirá que todos puedan disfrutar. Y es que, en palabras de Sánchez-Ballesteros: “Es para todas las edades”, y por eso hoy habrá unos talleres infantiles y juveniles para los principiantes (de 6 a 16 años). Los cursos, bajo inscripción previa, se centrarán en las disciplinas de skate, BMX, break dance y basket 3x3, con premios para quien participe. Debido a las restricciones sanitarias, los chicos y chicas solo podrán asistir acompañados por dos personas, que podrán esperarles en una zona de gradas especial o pasar a recogerlos a la hora acordada. Además, hoy será una jornada de entreno para los deportistas antes de las competiciones del fin de semana.
Tratando el tema de lo atípico de esta edición, debido a la situación derivada por el COVID-19, otra competición que también se ha visto afectada por la pandemia son las olimpiadas de Tokyo 2020. Y es que, precisamente, O Marisquiño coincidirá con el último fin de semana de los Juegos, que este año han incluido por primera vez una disciplina habitual del festival: el skate. A la par que esta nueva incorporación competitiva, que la dará a conocer internacionalmente, la organización de O Marisquiño pretende seguir expandiéndose. “No hay otro evento igual en todo el mundo, y estamos pensando y trabajando a largo plazo. Queremos llevar pruebas a otros puntos de la ciudad”, declaró a FARO Joako Ezpeleta, director del festival.
Con todo, tras la última edición de 2019, con percances incluidos, este año llega con novedades y, sin duda, con muchas ganas.
Las estrellas del deporte urbano llegan desde Tokio
Todos los caminos llevan a Roma y el de los participantes de O Marisquiño de este año vienen directamente desde Tokio. Y algunos con medalla, como es el caso del rider venezolano Daniel Dhers que después de lograr la plata en los Juegos Olímpicos va a disputar su primera competición precisamente aquí, en la ciudad olívica este fin de semana.
Pero no es el único que tiene línea directa con Tokio, pues algunas de las estrellas de este campeonato han estado nada más y nada menos que representando a su país. Es el caso de la holandesa Keet Oldenbeuving que ha participado en la comitiva de su país como abanderada.
Los primeros deportistas internacionales de gran nivel ya han comenzado a llegar a Vigo y el lunes ya aterrizó en la ciudad el norteamericano Daniel Sandoval, actual número 2 del ranking mundial de la UCI en BMX Freestyle y que sin duda será otra de las grandes atracciones del festival para el público asistente. Junto a él llegó otro destacado rider norteamericano de la disciplina, Jeremy Malott. Aunque no es de los favoritos y, sin embargo, muchos ojos están puestos sobre Ryan Decenzo, quién después de dejar boquiabierto en los X Game a más de uno, se erige como una de las figuras destacadas de la competición con la realización en el aire, de trucos imposibles.
Los participantes están poniendo toda la maquinaria a punto para disputar una de las ediciones de O Marisquiño más especiales. No sólo por la restricción de aforo y medidas sanitarias, sino porque se celebra simultáneamente con unos Juegos Olímpicos en los que algunos han tenido la suerte de participar. Y con ese buen sabor de boca, esa atmósfera de competición al más alto nivel elevarán aún más las expectativas de unos resultados que seguro, no defraudarán. Varios de ellos han querido anticiparse a la celebración de las pruebas y disfrutar de la ciudad olívica.
Un vigués, gran promesa
Y cómo no podía ser de otra manera, la joven promesa en el descenso, el vigués Francisco Vilaboa se perfila con grandes posibilidades en el descenso.
