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Coronavirus en Vigo

Así se desbocó el coronavirus en Vigo en 20 días

La denominada "quinta ola" ha disparado la incidencia y frenado el vaciado de los hospitales, pero por el momento no ha dejado ninguna víctima mortal

Cribado esta semana en el Covid-Auto del Álvaro Cunqueiro.

Un auténtico efecto rebote post-San Juan. El área sanitaria de Vigo ha visto crecer los casos de coronavirus en la ciudad en la última semana de junio y el primer tercio de julio al mismo ritmo que cayeron tras el final del estado de alarma.

El rápido ascenso de la incidencia acumulada, con cuatro jornadas por encima de los 100 nuevos contagios, hace temer que el próximo martes el comité clínico endurezca las restricciones en varios concellos del área. Preocupan especialmente la situación de Vigo, que ya supera los 200 casos en la IA a 14 días. Sin embargo, la denominada quinta ola afecta de forma desigual a varios indicadores.

Colapso en los cribados y PCR

La relajación de las medidas, la mayor transmisión de la variante Delta o los macrobrotes asociados a las fiestas de los grupos de población sin vacunar ha multiplicado por 7 la incidencia acumulada.

El 29 de junio y el 11 de julio se tocaba techo con una positividad del 11'75%, una cifra que no se ha podido reducir dada la saturación en los laboratorios que analizan las muestras. Frente a las 24 horas de espera desde que se citaba para una PCR hasta que se recibía el resultado, el proceso se ha demorado varios días.

La razón se encuentra en el aumento de test realizados, que se han duplicado en una semana en toda Galicia aunque siguen lejos de los picos de la tercera y cuarta ola. De esta forma, una gran cantidad de contactos estrechos se han mantenido en cuarentena sin llegar a realizar una prueba PCR que confirmara su positivo y obligara a confinar a terceros.

10 días con las UCIs vacías pese al repunte de hospitalizados

La vacunación también se deja notar en los ingresos hospitalarios. El área sanitaria viguesa mantiene cerradas sus UCIs desde el pasado 30 de junio al salir de ella el único crítico que había al comenzar el verano.

Y aunque los ingresos en planta han vuelto a crecer desde esa fecha, cuando había un único hospitalizado, el techo de 8 enfermos marcado este domingo sigue muy lejos de los 54 del 9 de mayo -cuarta ola- o los 201 que abarrotaron el CHUVI el 27 de febrero, en plena tercera ola.

Sin fallecidos en el último mes en al área sanitaria

La única cifra positiva llega de la mano de los fallecimientos. El contador de muertes con coronavirus en el área viguesa permanece inamovible en 439 personas desde el pasado 10 de junio, con el fallecimiento de una mujer de 64 años.

De esta forma, la tasa de letalidad del COVID-19 en el área continúa descendiendo hasta el 1'65%; aunque en el último mes se han curado unas 600 personas sin tener que lamentar el deceso de ninguna.

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