Habituados a intervenciones con animales como perros, gatos, serpientes o aves, los agentes de la UMIR (Unidad Medioambiental de Intervención Rural) realizaron este lunes un servicio diferente. Sobre las 9 de la mañana recibieron una llamada informando de un potro herido en las inmediaciones del cementerio de Candeán. Una vez allí descubrieron a la cría en el arcén, pero no estaba herida. Acababa de nacer y mostraba debilidad y dificultades para tenerse en pie y caminar.
Los agentes lograron, con la ayuda de los vecinos, conducir a la madre a un lugar más seguro, a una explanada alejada de la carretera. Cuando ambos estaban a salvo apareció el propietario de los animales, J.A.B. de Vigo y 57 años, que ayudó a la criatura a mamar.
Rescate de aves
La patrulla rural socorrió a dos aves en los últimos días. La primera de ellas, un águila ratonera incapaz de volar que se hallaba en el Camiño da Balanciña, en el entorno de Barreiro, en Cabral. Fue trasladada para su recuperación al centro de fauna salvaje de Cotobade.
La segunda ave rescatada fue una especie exótica, un caique que fue entregado por un particular a la Policía Local. El caso exigió nuevamente la colaboración del agente que esta especializado en el tratamiento y cuidado de este tipo de pájaros.
Finalmente logró contactar con la propietaria, que recogió el ave esa misma tarde.
