En algunos de los servicios del Chuvi que realizan operaciones fuera de la jornada ordinaria se extiende el descontento por las tarifas que abona el Sergas, que se recortó tras la crisis económica de 2008 y no se repuso. También porque ahora se hacen algunas más complejas. Según explican diversas fuentes sanitarias, el de Cirugía General habría dado un paso adelante y sus profesionales se plantearían renunciar a realizar estas intervenciones, llamadas comúnmente peonadas y que se realizan de forma voluntaria en horas extra.
Otro servicio en el que se pulsa este malestar es en Anestesia, que cuenta con una plantilla muy grande y en el que, fuentes internas, explican que “no hay unanimidad” sobre las medidas a tomar. Si decidieran dejar de hacer estas intervenciones, afectarían a toda la actividad de los quirófanos. Otros servicios, también molestos, están esperando a que Sanidade mueva ficha y se siente a hablar. Desde el Sergas rechazan hablar sobre el tema.
Por otra parte, el Sergas ha habilitado urnas y paneles para que la ciudadanía pueda expresar su agradecimiento a los profesionales, dentro del Plan de intervención psicosocial para el apoyo y atención a personal del Sergas en la pandemia de COVID.
