En noviembre de 2020, junto a otros tres asaltantes que lograron fugarse, asaltó un chalé de San Andrés de Comesaña (Vigo). Miembro de una banda itinerante y con varias identidades falsas, ingresó de inmediato en prisión. En mayo fue el juicio y este albanés aceptaba dos años de prisión. Y este mismo lunes recuperaba su libertad y salió de A Lama tras solo seis meses encarcelado: se le suspendió la condena por no superar los dos años y por carecer de antecedentes.

Pero la intención de este delincuente de regresar a Barcelona, donde alega que tiene su domicilio, ya no será posible. Y es que tras su excarcelación del lunes y tras intentar registrarse en un hotel de Vigo sin documentación, la Policía Nacional lo detuvo al descubrir que tenía en vigor una orden de expulsión a su país de origen, Albania, que fue dictada por Italia en 2017.

Esa orden también puede ejecutarse en España, por compartir territorio Schengen, por lo que, tras este arresto, el albanés pasó ayer a disposición del Juzgado de Instrucción 6 de Vigo, en funciones de guardia. La jueza estableció la expulsión, que debe ejecutarse en un máximo de 60 días, y mientras no lo envíen a su país estará en un centro de internamiento de extranjeros de Madrid. Su letrado pidió sin éxito que pudiese esperar en libertad la fecha de su marcha de España.