Un enjambre de abejas decidió montar su panal en una casa de Vigo. Sus sorprendidos propietarios vieron como los insectos hiceron un nido en la rama de uno de los árboles de esta vivienda situada en San Miguel de Oia. La impresionante estampa muestra la colmena repleta de abejas, a escasos metros del inmueble. Así que, para atajar la situación, los propietarios contactaron con un apicultor, vecino de los dueños de la casa, para poder retirar el nido.
El experto, que traía una caja-colmena apropiada para sus nuevas inquilinas, taló la rama donde anidaron arremolinadas. Antes, envolvió hojas aromáticas en papel y les prendió fuego para lograr humo que aplicó desde un ahumador. Y es que con el olor del humo, las abejas piensan que su casa está en llamas, y por instinto, inician su simulacro de incendio. Así, empiezan a desfilar hacia la nueva colmena para instalarse allí y fomar su nuevo hogar.
El vecino utilizó un ahumador tradicional que consistía en un recipiente de metal con un fuelle adjunto. Con este instrumento, una vez prendido el fuego, el objetivo era producir una gran cantidad de humo espeso que provocara la "evacuación" de las abejas, y éstas fueran guiadas a la caja donde construirán ese nuevo panal. Allí tendrán que estar a unos 30 grados de temperatura, aunque aún tardarán tiempo en producir miel.